Sin lugar a dudas, la protección de las personas es un punto fundamental en el desarrollo de los nuevos modelos de Citroën. La gama de la firma francesa destaca por un diseño de líneas fluidas que además de ser un elemento distintivo, consigue reducir la gravedad de los posibles accidentes.
La búsqueda de soluciones para asegurar la seguridad de los peatones viene de lejos en la firma. Estos progresos tecnológicos han conseguido que, además de intentar minimizar las consecuencias de un accidente, sea posible evitarlo.
Una de estas innovaciones es el Active Safety Brake, un sistema de frenado de emergencia que limita el riesgo de colisión. Haciendo uso de sensores y cámaras multifunción, identifica peatones, animales u otros vehículos que se encuentren en la calzada o en sus bordes. Si el coche se acerca a ellos, se activa una alarma visual y sonora, y si el conductor no reacciona, el sistema Active Safety Brake interviene y frena automáticamente el vehículo.
Este innovación está disponible en varios modelos de la gama como el C3, el C3 Aircross, el C5 Aircross, el C5 Aircross Hybrid, el Berlingo, el C4 SpaceTourer, el SpaceTourer, el ë-SpaceTourer, el C4 y el ë-C4.
Regulador de Velocidad Activo
Esta tecnología trata de proteger a los pasajeros de un riesgo por una colisión con otros vehículos, adaptando la velocidad del vehículo a la del que lo precede. Otros modelos con cambio Automático EAT8, disponen de Regulador de Velocidad Activo con función Stop, como el Grand C4 SpaceTourer.
Por último, el Regulador de Velocidad Activo con función Stop&Go identifica el vehículo precedente y adapta automáticamente la velocidad manteniendo la distancia de seguridad elegida hasta que el vehículo precedente se detiene interviniendo sobre el freno y el acelerador. Este sistema permite ponerse en marcha sin intervención del conductor, así como regular la velocidad entre 30 y 180 km/h, controlar la velocidad y la distancia con el vehículo precedente.
