Finalmente ya hemos podido ver el futuro Porsche Boxster. La firma alemana, que trabaja en el desarrollo de varios nuevos modelos y renovaciones de algunos de sus coches, también ha empezado a probar, sobre el terreno, su nuevo Boxster.
El roadster alemán, que fue hace 25 años uno de los modelos con los que la marca inició su proceso de popularización –que completó, por cierto, el Porsche Cayenne- apuesta en esta nueva generación por la tecnología de propulsión cien por cien eléctrica.
Una apuesta interesante que la marca alemana está llevando a cabo en varias de sus gamas. Por ejemplo, el futuro Macan, que ya hemos visto en varias ocasiones y que solo va a disponer de un sistema de propulsión cien por cien 0 emisiones.
Porsche Boxster y Cayman serán eléctricos
Eso mismo ocurre con este Boxster, así como con su homólogo cerrado, el coupé Cayman, que también optará solo por la tecnología eléctrica de propulsión.
Pues bien, para empezar a estar listo para su llegada, que será en 2024, los ingenieros de Porsche han comenzado a prepararlo en las circunstancias más duras, sobre las heladas carreteras del norte de Europa. Un entorno que suele ser muy complicado para todo tipo de vehículos, pero especialmente para los eléctricos, pues las bajas temperaturas –y aquí estos días se llega a los -23 grados- afectan mucho al rendimiento.
Por eso, para estar preparados, han empezado las pruebas en estas complicadas condiciones atmosféricas. Y no tanto poniendo a punto elementos de la carrocería o dinámicos.
De hecho, el estilo del nuevo Porsche Boxster, de momento, no parece cambiar mucho respecto al modelo actual. Pero de aquí a su llegada, todo puede evolucionar… Y seguro que lo hace.
El nuevo Boxster, lo mismo que el Cayman, dirá, por tanto, adiós a los motores de combustión y se centrará en la movilidad eléctrica cien por cien. Y lo hará con diferentes alternativas y grados de potencia en su gama. Pero todos con una exigencia, mantener el nivel de prestaciones y dinamismo propios de la marca.