El coste de la recarga pública para vehículos eléctricos en España se encuentra entre los más elevados de Europa, lo que, combinado con la falta de control y seguimiento de la eficiencia de los puntos de carga que reciben subvenciones públicas, ha llevado a la infrautilización de la red, según un informe del Observatorio de Sostenibilidad (OBS).
1Revisión de las tarifas de carga del coche eléctrico
La infrautilización de la red de carga puede ser un obstáculo importante para la adopción de vehículos eléctricos, ya que los conductores pueden verse desalentados por los costos más altos en comparación con otras formas de energía, como la gasolina o el diésel, y la falta de garantía de que los puntos de carga estén disponibles y funcionando correctamente.
Para promover una mayor adopción de vehículos eléctricos y la utilización de la red de carga, es fundamental abordar estos problemas, incluyendo la revisión de las tarifas de recarga y la implementación de sistemas de seguimiento y control de la eficiencia de los puntos de carga subvencionados.
Además, la expansión de la infraestructura de carga y la mejora de la accesibilidad a los puntos de recarga son aspectos clave para impulsar la movilidad eléctrica y reducir la dependencia de los combustibles fósiles en el transporte.
Asimismo, la falta de interoperabilidad, algo que no sucede en otros países europeos pues es un requisito obligatorio, está afectando también a que la recarga sea más cara, según apunta el III Informe sobre Movilidad Eléctrica en España elaborado por OBS y al que ha tenido acceso EP.
