Si consideras que la DGT te ha multado injustamente, entonces aprovecha el recurso para presentar las alegaciones que estimes oportunas, para preservar tus legítimos derechos. ¿Qué me dices? ¿»Cualo»? y en murciano; «¿eso que e lo que e?».
Si, recurrir al derecho de alegación por aplicación de una sanción que consideras injusta, es el camino mas sencillo para entablar una lucha administrativa con quien te ha sancionado. Y esta establecido por ley, que se ha de otorgar ese tramite a quien convenga, para garantizar justicia y derecho sobre la ciudadanía. Dicho así, puedes pensar que la presencia de un abogado es necesaria para realizar estos tramites. Nada mas lejos de la realidad, pero siempre es mejor tener una opinión profesional, por lo que no lo desestimes, especialmente en los casos mas complejos.
Escribir bien y que se te entienda
Quizás lo mas complejo de este proceso, sea el escrito de alegaciones. Si bien es cierto que lo puedes redactar tu en persona, cuidando las formas y estructura, así como el lenguaje, siempre has de valorar la opción de que un profesional, con conocimientos jurídicos te asesore o lo realice él. Aunque después los tramites de presentación, los puedas hacer tu personalmente.
Es el quiz de la cuestión, desarrollar un escrito cargado de lógica, argumentada desde donde la injusticia quede enmarcada en preceptos legales establecidos e incluso en precedentes legales. Es lo que tiene la administración y la justicia, que se han de guiar por los casos tratados con anterioridad para garantizar los derechos generales, y si avalas tus reclamaciones con ejemplos previos, esto supone una posición de descargo mas positiva.
Sin embargo puedes intentarlo por ti mismo, centrando mucho los argumentos de tu reclamación, en los hechos denunciados y los motivos que justifican la misma.
