Continuando con la celebración de su 55 aniversario, Mercedes-AMG lanza otro modelo del que solo se fabricarán 55 unidades. Esta vez se trata del Mercedes-AMG GT Track Series. El supercar de la marca de la estrella se une así al exclusivo Mercedes-AMG G 63 ‘Edition 55’.
Eso sí, a diferencia del todoterreno, el nuevo Mercedes-AMG GT Track Series no puede utilizarse en la calle. Únicamente en circuito. Está basado en el rapidísimo Mercedes-AMG GT Black Series, que es prácticamente un coche de competición matriculable. De hecho, este último es el nuevo Safety Car de la Fórmula 1.
Un coche de competición en toda regla
Pues bien, el Mercedes-AMG GT Track Series es todavía más salvaje que el Black Series. Tanto por dentro como por fuera cuenta con elementos específicos. El objetivo es ser más rápido. Y lo consigue con una aerodinámica todavía más trabajada que la del Black Series. De hecho, puede pasar sin ningún problema por un coche de carreras. Es, en esencia, un Mercedes-AMG GT de la categoría GT3 que Mercedes-AMG pone a la venta para celebrar el 55 aniversario de este departamento.
Prueba de ello es su enorme alerón trasero fijo regulable. El difusor trasero con las salidas de escape integradas. El splitter delantero. O Los deflectores laterales del paragolpes. Todos estos elementos están fabricados en fibra de carbono, como no podía ser de otra manera. También incorpora llantas forjadas ultra ligeras de 18” y diseño multirradio.
El ahorro de peso continúa de la mano de unos cristales de plexiglás como los de los modelos de competición. Gracias a todos estos elementos, el Mercedes-AMG GT Track Series no solo es capaz de mantenerse más pegado al suelo que el Black Series. También pesa menos. Esta serie especial detiene la báscula en 1.400 kg.
El Mercedes-AMG GT Track Series es todavía más potente
Pero eso no es todo. Su motor V8 biturbo de 4.0 litros desarrolla 14 CV y 50 Nm más que en el Black Series a través de una gestión electrónica rediseñada e inyectores de mayor caudal. De esta forma, el Mercedes-AMG GT Track Series llega hasta los 778 CV y entrega 850 Nm de par. Semejantes cifras las gestiona una caja de cambios secuencial de seis relaciones exclusiva.
La electrónica también ha sido recalibrada para adaptarse a través de 12 modos de conducción que actúan sobre el control de tracción el sistema ABS. Pero no es lo único que ha cambiado. El depósito de combustible también es nuevo. Tiene 120 litros de capacidad, suficiente para que esta bestia permanezca en pista largas tiradas sin tener que parar a repostar.
No hay sitio para el confort en el interior del Mercedes-AMG GT Track Series
Y, como todo coche de carreras, su interior está hecho para centrarse en la conducción. No hay elementos de confort. Solo un panel digital para la instrumentación que proporciona todo tipo de datos y bien podría ser el de un coche de carreras. Por lo demás, el Mercedes-AMG GT Track Series esconde en su habitáculo una jaula de seguridad integral y botones para las funciones básicas.
También cuenta con un espectacular volante rectangular que recuerda al de un Fórmula 1. Así como el asiento de tipo bucquet, los arneses y los botones para activar los extintores. La fibra de carbono, además, está presente prácticamente en cada centímetro del interior. En definitiva, su interior es el de un coche de carreras.
Es tan rápido como caro
¿Y cuánto cuesta disfrutar de esta bestia? El Mercedes-AMG GT Track Series tiene un precio de 369.000 euros antes de impuestos. Es caro, pero también es la forma más parecida de tener un Mercedes de competición, así como uno de los Mercedes-AMG GT más exclusivos. Pero, si estás pensando en comprarlo, recuerda: solo podrás utilizarlo en circuito. No hay forma de matricular a esta bestia.
