comscore

Transforma tu Suzuki Jimny en un Lancia Delta Integrale o un R5 Turbo

Lo de transformar los Suzuki Jimny en otros modelos modificando su frontal, llantas y decoración se nos está yendo de las manos. Ya os hemos hablado de los kits que convierten el todoterreno japonés en un Mercedes Clase G, en un Ford Bronco o en un Land Rover Defender, entre otros todoterrenos clásicos, pero el último atrevimiento del especialista Damd traspasa todas las barreras de la lógica e incluso del buen gusto.

Las transformaciones del Suzuki Jimny que traemos hoy aquí se han “perpetrado”, como es habitual, en Japón, donde Damd ha desarrollados dos kits para amantes de los automóviles compactos de altas prestaciones.

Este especialista del travestismo automotriz del que ya te hemos hablado en anteriores ocasiones tiene propuestas verdaderamente originales y logradas, como el Renault 4 en el que se transforma el Suzuki Lapin al pasar por sus manos o el mini Chrysler Voyager que es capaz de recrear a partir de un sencillo Suzuki Wagon R+ (kits que podéis ver justo debajo de estas líneas). Pero lo de hoy es, quizá, demasiado.

El Suzuki Jimny convertido en una Deltona

Así, el especialista japonés del tuning ha cogido el que posiblemente sea su modelo más exitoso, el Suzuki Jimny Sierra (o Jimny “a secas”, en Europa) y, aprovechando sus vías ensanchadas que sobresalen de la carrocería y sus formas cuadradas, ha decidido recrear con él la estética de los Renault 5 Turbo y Lancia Delta Integrale. 

Comenzando por el segundo, Damd ha tomando elementos de las diferentes evoluciones del radical compacto italiano. Así, en el frontal del kit desarrollado para reemplazar al del Suzuki Jimny encontramos unos faros que se asemejan en la forma a los de los primeros Lancia Delta HF 4WD, Integrale e Integrale 16V, con la óptica de cruce más grande y el reflector esculpido en el cristal.

Por otra parte, sobre el faros de las más compactas luces largas se imita la oquedad que aparecía en los grupos ópticos de la última evolución de la “Deltona”, un espacio que en el deportivo italiano estaba perforado para lograr una mayor refrigeración en la versión de rallys, mientras que aquí es un puro ornamento.

Para el capó del Suzuki Jimny no se ha previsto la joroba empleada por los Delta 16V y Evoluzione, necesaria para hacer hueco a la nueva culata, y lo que verdaderamente chirría, aparte del concepto general, es el uso de un parachoques copiado del empleado por el los Renault 5 Turbo y Turbo II, un “pastiche” que nos lleva a hablar del segundo kit de Damd.

El Suzuki Jimny convertido en un Renault 5 Turbo

Comercializado como Little 5, el segundo kit para el Suzuki Jimny es igualmente de juzgado de guardia, pero hay que reconocer que está mucho más logrado. Aquí, además de faros y parrilla inspirados en los de los R5 Turbo de “culo gordo”, encontramos unos parachoques muy logrados, tanto delante como detrás, si bien el alerón no tiene mucho que ver con el original, mientras que el spoiler del Delta Integrale Evoluzione sí está bastante logrado.

No faltan apósitos en las aletas y nuevos grupos ópticos integrados en el parachoques trasero, así como unas llantas OZ Razing de rallys que, si bien cuadran con la época del Delta (que nunca las usó oficialmente, sino que empleaba las no menos míticas Evo Corse Montecarlo), rechinan bastante en el caso del R5 “culo gordo”, que solía emplear llantas Minilite pero nunca las OZ Racing, popularizadas en realidad por las victorias del Toyota Celica de Carlos Sainz en los rallys del Mundial a principios de los años 90.

En cualquier caso, se trata de unas llantas preciosas que ofrecen además la ventaja de esconder los tambores de freno trasero característicos del Suzuki Jimny. Por otra parte, son originales, creadas en colaboración con el fabricante, por lo que su robustez y calidad están fuera de toda duda. Ah, y si buscas un toque más discreto (lo que sería extraño si optas por transformar tu Suzuki Jimny en uno de estos dos adefesios), puedes elegir el acabado en grafito oscuro con letras blancas en lugar del acabado blanco con letras rojas que se ve en las imágenes.

Tecnologías obsoletas

Otro aspecto que nos gusta más bien poco es el hecho de tener que recurrir a faros halógenos con difusores esculpidos en el cristal en lugar de en la parábola, una tecnología que disminuye la luminosidad y que fue desechada de forma generalizada con el nuevo siglo.

También es justo mencionar que, en España, el cambio de parachoques y de faros es una reforma que obligará a presentar en la ITV un informe sellado por un ingeniero y un certificado del taller que ha instalado el kit, ya que tanto el cambio de faros como de parachoques alteran potencialmente la seguridad del vehículo, y no parece que Damd tenga intención de hacer costosos ensayos y homologar sus piezas para que cumplan con la directiva europea de peatones o para certificar que el sensor de disparo de los airbags y la llamada de emergencia no se ve alterado por las nuevas piezas.

Y es que resulta divertido travestir los coches modernos para que parezcan “otra cosa”, pero más allá de la gracia que pueda hacernos, hay que tener en cuenta que detrás del diseño y desarrollo de las piezas originales está el trabajo y el esfuerzo de mucha gente, así como las fuertes inversiones de grandes compañías para las que el diseño de sus vehículos es de todo menos una broma.