comscore

Ruf CTR Yellowbird. Homenaje a su antepasado

Puede parecer que este impresionante Ruf CTR Yellowbird que se ha presentado en el Salón de Ginebra no es más que una obra de algún preparador especializado en actualizar clásicos Porsche, como por ejemplo pudiera ser el caso de los señores de Singer.

Sin embargo este Ruf CTR Yellowbird esconde mucho más, pues puede ser uno de los deportivos más impresionantes de la temporada.

Todo fabricado en carbono

Ruf es conocido históricamente por modificar y crear algunos de los Porsche más exclusivos de la historia, pero esta última criatura nace de cero. Para ello han ideado un chasis fabricado por completo en carbono y sólo las zonas de deformación delantera y trasera se han construido en acero para absorber impactos, al igual que una jaula de seguridad que está perfectamente mimetizada en su interior.

Sobre este chasis se han colocado unas suspensiones heredadas directamente de la competición y también una carrocería inspirada en la de los legendarios Porsche 911 de la generación 964, sólo que está fabricada por completo en fibra de carbono. Gracias al prominente uso de este ligero material, esta máquina ideada por Ruf pesa sólo 1.200 kilos en vacío.

1.200 kilos y 700 CV de potencia

Para impulsarlo se apuesta por un corazón desarrollado por el propio preparador alemán. Se trata de un bloque de 3,6 litros con seis cilindros en posición horizontal, es decir, bóxer, que suma dos turbocompresores y lubricación por cárter seco, el cual presume de poder generar la friolera de 700 CV de potencia a 6.750 rpm, además de 880 Nm de par motor a 2.750 rpm. Semejantes cifras son enviadas a las ruedas traseras por medio de un cambio manual de 6 velocidades.

Con una relación peso/potencia de 1,71 kg/CV, este impresionante Ruf CTR Yellowbird se permite el lujo de acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 3,5 segundos, mientras que los 200 km/h los alcanza en apenas 9 segundos. Y no para hasta superar los 360 km/h.

Para detenerlo, Ruf apuesta por un poderoso equipo de frenos con discos carbocerámicos de 380 milímetros, que son mordidos por pinzas de seis pistones delante y cuatro pistones detrás.

Ruf sólo va a fabricar 30 ejemplares de esta máquina, que tiene un precio de partida de 750.000 euros.