Los faros escamoteables son el punto estrella de muchos coches míticos. Este tipo de luces, que se escondían por el día y aparecían por la noche, como unos ojos saltones, era un detalle que todos los usuarios adoraban. Con el tiempo este tipo de luces ha ido desapareciendo, debido a su mala aerodinámica, su costoso mecanismo, y sobre todo, debido a que ponían un peligro mortal en caso de atropello.
Pese a todos estos contras, este tipo de sistema fue muy codiciado en su épica, y sigue siendo un aspecto que reúne todas las miradas. Los deportivos eran muy dados a portar este tipo de luces para poder burlas las leyes mínimas de altura, que sin ellos no habrían podido cumplir. En este artículo vamos a repasar los deportivos más míticos que tenían este punto en común tan espectacular.
Deportivos míticos: Opel GT de 1968
Los faros escamoteables tardaron mucho tiempo en estandarizarse, por eso eran tan diferentes en cada vehículo. Los faros de este Opel GT no solo llamaban la atención en el momento de elevarse, sino que en este modelo también giraban. Un detalle que no pasaba desapercibido para los amantes de este tipo de vehículo. Salió a la venta en 1968 y llegaron a venderse más de 100.000 unidades.
Los faros delanteros se accionaban mecánicamente mediante una palanca. Una de sus características llamativas es que no contaban con maletero, para guardar las maletas tenían que meterlas desde el interior del vehículo. Este coche dejó de fabricarse en agosto de 1973.
