Viene el calor y parece que viene con ganas, además. Por eso entramos en época de aire acondicionado… y de hacernos preguntas. La principal es si realmente su uso afecta a la potencia del vehículo: la respuesta es sí; pero, ciertamente, no se trata de una reducción de la potencia, sino de una redistribución a fin de atender a otras funciones del coche.
El aire acondicionado coge aire caliente para, a su vez, enfriarlo e introducirlo en el interior del vehículo. El climatizador está compuesto por cuatro elementos: compresor, condensador, válvula de expansión y evaporador. Cuanto más caliente esté la temperatura ambiente y más frío esté programado el climatizador, más energía se gastará.
2Expulsa el calor del habitáculo
Puede parecer poco ortodoxo, pero funciona. El habitáculo del coche, si está aparcado bajo el sol en verano, puede estar a 60 grados, sin exagerar. Antes de meterte en ese infierno rodante, abre todas las ventanillas durante un par de minutos y luego entra al vehículo o, si quieres hacerlo todavía más rápido, abre una de las ventanillas traseras al 50% y abre y cierra una de las puertas delanteras sin parar durante 40 segundos.
Harás ejercicio, eso seguro, pero también bombearás todo el aire del habitáculo hacia afuera y habrás reducido la temperatura del interior en más de 15 grados en un tiempo récord. Ahora ya podrás emprender la marcha y al motor de tu coche no le meterás tanta caña para conseguir la temperatura agradable que necesitas.
