Seamos sinceros, el patinete eléctrico, llamado a formar parte de los vehículos considerados de movilidad personal, ha tomado protagonismo en el punto y hora en que no tenia regulación administrativa y al tiempo proporciona al usuario una libertad e independencia de movimiento, en zonas urbanas extraordinarias, con las ventajas económicas que aporta el no pagar impuestos de circulación, no necesitar, hasta hace poco denominaciones técnicas, no usar combustible contaminante y el resto de aspectos que si soportan el resto de vehículos a motor.
Una necesaria regulación frente a males mayores
El incremento de uso, y por ende el aumento de la siniestralidad de estos vehículos, en algunos casos muertes por atropello, planteó la necesidad de regular y adecuar las normas de circulación vigentes. Y en una reciente modificación se hizo alusión explicita a que los patinetes eléctricos se considerasen un vehículo mas, por lo que se establecieron normas concretas que afectan a todos lo VMP, (patinetes y bicicletas).
Se pretende con esta modificación legislativa, que por parte de los usuarios de este tipo de vehículos, quede acotado y definido por donde pueden circular, en que condiciones deben hacerlo y las consecuencias de incumplir las normas. Para ello se modifican tanto el reglamento general de circulación como el de vehículos.
