El estado de euforia que se está viviendo en Aston Martin produce, por ejemplo, que el excelente cuarto puesto de Bakú pueda saber a poco… pero nadie puede olvidar que siguen segundos, por delante de Ferrari y Mercedes, mientras que acabaron séptimos en 2022. La primera carrera sin podio iba a llegar tarde o temprano, pero lo hizo incluso en un buen fin de semana, con cero reproches para el equipo.
Alonso se quedaba con ese buen ritmo tras la carrera, señal positiva para el AMR23 en un circuito desfavorable: «No fuimos tan competitivos como en las primeras tres carreras pero en la carrera el ritmo era muy bueno, muy fuerte. Luchamos por el podio, quedamos a un segundo de Leclerc, algo que es alentador. En un mal fin de semana de Aston Martin luchamos por el podio contra el mejor fin de semana de Ferrari, que hizo la pole».
2Aston Martin va perdiendo la batalla de la evolución
Pese a contar con 444 horas más que Red Bull para desarrollar su coche hasta el 1 de julio, día en el que el baremo del tunel de viento se actualizará con las posiciones actuales de Constructores, Aston Martin no está llevando piezas nuevas a cada carrera. Su desarrollo se reduce al maltrecho alerón trasero de Bakú, cuyo DRS tantos problemas les dio en Libres y clasificaciones… y que sí, fue arreglado con lubricante, una solución muy de andar por casa.
¿Y en Miami? Algún equipo llevará piezas nuevas al no ser carrera al sprint y tener hasta tres entrenamientos libres para poder testar las novedades… pero no será Aston Martin, que tendrá que seguir lidiando con su mismo coche de Baréin prácticamente. Ya cuentan los días para Ímola, donde por fin les espera un gran pack de actualizaciones, pero ojo porque allí sus rivales también esperan mejorar.
