Sin dudas, es uno de los elementos que más utilizamos del coche, y desde luego, los vemos diariamente. Sin embargo, ¿Cuánto hace que no cambias las varillas del limpiaparabrisas? Te recuerdo, que con el tiempo tienden a ensuciar los cristales del vehículo más que a limpiarlos, comprometiendo la visibilidad en la ruta y por consiguiente la seguridad del conductor. Por ello, con unos simples trabajos de mantenimiento puedes hacer que vuelvan a limpiar como la primera vez, ampliando su vida útil.
A continuación, aquí te mostraremos algunas curiosidades sobre esta herramienta imprescindible del coche.
Aparición de los automáticos
Para concluir, el Citroën 2CV, disponía originalmente de un sistema de limpiaparabrisas mecánico conectado a la transmisión mediante un cable con el que también funcionaba el velocímetro. Cuando el coche estaba parado, los aparatos no se movían, y había que accionarlos manualmente. Por ende, hasta principios de los años 60 no se introdujeron los eléctricos en este modelo. Otro Citröen, el SM de 1970, fue el primer vehículo que incorporó limpiaparabrisas automáticos en función de la lluvia.
