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Renault ZOE ZE 40. Más lejos y con menos ansiedad

Si echamos un vistazo a las previsiones, no hay duda de que el futuro es eléctrico. Hay rigurosos estudios que avanzan que en el año 2040 el 35 por ciento de los vehículos serán eléctricos, un fabricante del calibre del Grupo Volkswagen anuncia que lanzará más de 30 modelos electrificados en 2025 e, incluso, se comenta que en 2020 un vehículo eléctrico podría ser ya más asequible que otro similar térmico. Si a eso añadimos las normativas cada día más exigentes y el blindaje de las grandes ciudades para controlar el serio problema de la contaminación parece un hecho que el vehículo eléctrico se convertirá en el gran protagonista en los próximos años.

Y si observamos la actual parrilla de salida, el Renault ZOE, con más de 50.000 unidades vendidas en Europa,  es el modelo más popular a nivel de ventas. La marca francesa fue pionera a la hora de apostar sin miramientos por esta tecnología y por eso puede presumir de que uno de cada cuatro automóviles eléctricos que circulan por el Viejo Continente llevan su firma.

No conozco a nadie que no le guste el funcionamiento de un coche eléctrico. Silenciosos y refinados en marcha, ofrecen un gran rendimiento en cuanto a prestaciones se refiere y desde hace años su diseño ya no condiciona aspectos en habitabilidad o maletero. El problema para muchos usuarios sigue siendo la autonomía y el tiempo de carga de la batería.

En este sentido, el nuevo ZOE ZE 40 prácticamente ha duplicado su autonomía. Hasta ahora la batería de 21 kwh de capacidad le permitía cubrir hasta 240 kilómetros; ahora incorpora una nueva con 41 kwh que incrementa la distancia a recorrer hasta los 403, una cifra que reduce considerablemente la ansiedad del conductor a la hora de utilizar su vehículo. Además permite a este modelo convertirse en la mejor opción del mercado a la hora de valorar la relación autonomía-precio. Y una vez dicho esto comentar que la autonomía real en condiciones de tráfico urbano y extraurbano se acerca más a los 300 kilómetros que a los mencionados 403.

Mismo tamaño, más eficacia

La nueva batería de 41 kwh de ion-litio tiene el mismo tamaño que la conocida de 21 kwh, se ubica entre ambos ejes y bajo el asiento trasero y hereda las 192 celdas repartidas en 12 módulos. Desarrollada en colaboración con LG, duplica su eficiencia gracias a dos soluciones. En primer lugar se han replanteado las proporciones de los elementos químicos que entran en reacción, y por otro se ha conseguido añadir un 10 por ciento de la materia activa de las celdas, reduciendo el espacio entre las celdas para que éstas sean más espesas. Esto provoca un incremento de peso de 22 kilos (pesa 305 kilos). Se mantiene el eficaz sistema de refrigeración de aire que mantiene su temperatura entre 15 y 28 grados centígrados aunque el termómetro exterior se desplome, vital en los duros inviernos de los países nórdicos.

El motor eléctrico síncrono con rotor bobinado R90 que eroga 92 caballos de potencia y 225 Nm de par máximo prácticamente desde el inicio de la marcha es desarrollo exclusivo de Renault. Se trata de la unidad que hemos probado por tierras portuguesas, aunque también hay una segunda variante Q90 que rinde 88 CV (220 Nm). Para el cambio en ambos casos se recurre a una caja de una sola relación, como es habitual.

Y ya que entramos en materia, comentar que se ha aprovehado la ocasión para actualizar los acabados, el equipamiento y lanzar una nueva y exclusiva versión Bosé. Esta se viste con un único color gris rodio, se remata con tapicería de cuero en el interior, introduce asientos delanteros calefactados y presume de un equipo de sonido con siete altavoces, incluido un cajón de bajos ubicado en el maletero. Por cierto éste presenta un volumen más que aceptable, con 338 litros de capacidad.

Comenzamos nuestra toma de contacto. Al iniciar la marcha nos llama al atención que, pese a estar a plena carga, la autonomía que marca en el cuadro de mandos es de 295 kilómetros. El motivo es que el sistema tiene memoria y tiene en cuenta el tipo de conducción protagonizada en las últimas horas. Es cierto que pese a todo la ansiedad se reduce cuando vemos el logo ZE 40. Por delante tenemos un trazado variado, en el que destaca sobre todo el uso por carretera y autopista, lo que nos da una idea de sus nuevas intenciones.

Dos personas por coche, con la climatización puesta, equipaje y sin demasiados miramientos hacia una conducción eficiente precisamente. Acelera de manera notable, firmando 13,2 segundos en el 0 a 100 km/h, y forzando a tope la velocidad máxima se limita a 135 km/h (141 en el marcador). Adelantamos vehículos sin reparos y comprobamos que presume de una estabilidad notable, pese a sus 1.480 kilos de peso en orden de marcha y a montar unos neumáticos Michelin Energy 195/55 R16, muy eficientes de cara al consumo pero no un prodigio de agarre al asfalto precisamente.

Consumos atractivos

Llegamos a nuestro destino tras recorrer 161 kilómetros y el consumo medio ha sido de 15,9 kwh. Se habían 'fundido' un total de 25 kwh de la batería y la autonomía todavía nos indicaba 101 kilómetros más. Al día siguiente el trazado es más corto, pero casi exclusivamente por autopista. Combinamos el modo de uso normal con la función ECO y aquí las cosas cambian un tanto. A velocidades mantenidas entre 90 y 120 km/h por autopista el consumo se dispara y en 87,7 kilómetros de recorrido hemos consumido un total de 17 kwh. Es el peor de los escenarios para un vehículo eléctrico, pero está claro que el nuevo ZOE nos convence. Ya no sólo sirve para el día a día por la ciudad; también podemos afrontar retos interurbanos de mayor rango, como escapadas de fin de semana.

No hemos tenido ocasión de probar dos nuevas y atractivas aplicaciones para este modelo. Se trata de la localización de los puntos de recarga europeos desde el sistema de infoentretenimiento R-Link. La aplicación ZE Trip permite localizar e identificar el tipo de punto de recarga para planificar el desplazamiento. Estará disponible en los primeros meses de 2017. Algo más tardará en llegar el denominado ZE Pass, que ofrece similares funciones pero desde nuestro smartphone o tablet, y nos permitirá pagar la carga desde esos artilugios.

Tampoco estuvimos pendientes de la carga de la batería porque la realizaron los responsables de Renault. En este sentido comentar que en el mejor de los casos necesitará 1 hora y 40 minutos (con una toma de 43 kw y borne trifásico de 63 amperios) y en el peor empleará 25 horas en una sencilla toma doméstica. Esto significa que prácticamente se duplican los tiempos respecto a la batería de 22 kwh, aunque para salir del paso y con carga trifásica podemos en apenas 30 minutos recorrer 120 kilómetros.

El nuevo ZOE se comercializa con cuatro niveles de acabado. El de acceso se denomina Entry y sólo se ofrece con la variante de batería de 22 kwh. Si apostamos por la nueva, con capacidad de 41 kwh, los acabados serán Life, Intens y Bosé. Además se puede optar por comprar o alquilar las baterías. En este segundo caso el precio influye en función del kilometraje anual que se vaya a realizar, pero a título orientativo podemos decir que si pactamos 7.500 kilómetros al año nos costará 59 euros al mes con la batería de 22 kwh y 69 euros la de mayor capacidad. Y si un cliente actual del ZOE quiere incorporar la nueva batería, lo podrá hacer tras desembolsar 3.500 euros. Por cierto, la garantía de la batería en caso de compra es de ocho años o 160.000 kilómetros.

El nuevo ZOE ZE 40 está disponible entre 24.625 y 29.225 euros, si optamos por el alquiler de la batería, y entre 32.125 y 36.725, si decidimos comprarla. Si nos vale con la opción de 22 kwh, sólo disponible con la versión de acceso Entry, el precio es de 22.125 (alquiler) y de 29.625 (compra).