Aparcar mal es un gesto muy habitual en las ciudades. Ante la escasez de plazas de estacionamiento, muchos conductores recurren a dejar el coche en lugares inadecuados, que pueden obstaculizar el tráfico y generar situaciones peligrosas. Para desincentivar estas malas prácticas, los ayuntamientos emiten miles de multas de aparcamiento.
El Ayuntamiento de Benicarló, en la provincia de Valencia, ha decidido tomar medidas contundentes para poner fin a los problemas de tráfico causados por los estacionamientos indebidos en el municipio. Las multas que pondrá este consistorio a los conductores que aparquen mal, pueden ascender hasta los 3.000 euros.
Estacionamientos en lugares no habilitados
Con el objetivo de garantizar la seguridad vial y fomentar el cumplimiento de las normas, se han impuesto multas elevadas a los conductores considerados irresponsables, llegando algunas sanciones a alcanzar los 3.000 euros. Esta iniciativa busca disuadir a los infractores y concienciar a la ciudadanía sobre la importancia de estacionar correctamente.
Una situación que ha resultado especialmente costosa para un vecino de la zona ha sido la de abandonar su vehículo en un lugar no habilitado. Junto a otro conductor que estacionó su coche en una zona verde sin contar con la correspondiente tarjeta del SER (Servicio de Estacionamiento Regulado), ambos han recibido una multa de 3.000 euros. Esta cifra supera notablemente el importe típico de las sanciones por mal aparcamiento, evidenciando la firme postura del Ayuntamiento frente a esta conducta.
