Después de meses de discusiones se ha llegado a un acuerdo sobre la influencia del Estado francés en la Alianza que los dos fabricantes de automóviles mantienen desde 1999, gracia al equilibrio alcanzado entre Renault y Nissan.
El acuerdo, que perpetua la Alianza y promueve su desarrollo, se asienta en tres puntos:
1.- Mantener el valor doble de los votos del Estado francés, efectivo desde el 1 de abril de 2016, limitando los derechos de voto de Francia en las decisiones no estratégicas de Renault entre un 17,9 y 20 por ciento.
2.- La no activación de los derechos de voto de Nissan en Renault.
3.- Un contrato entre las dos automovilísticas para evitar la ingerencia de Renault en la gobernanza de Nissan, conservando una practica en vigor desde hace dieciséis años.
Mirada al futuro
Alcanzado el acuerdo, Carlos Ghosn, el presidente y director ejecutivo de la Alianza Renault Nissan, expresaba su fatisfación por el esfuerzo de las partes involucradas y su espíritu constructivo y visión de negocio. También expresaba su confianza incitando a «todas las partes que vuelven su atención a operaciones del día a día para lograr el crecimiento sostenible para Renault y Nissan y aumentar el rendimiento de la Alianza a través de las sinergias adicionales».
Por su parte, el Consejo de Administración de Renault da la bienvenida a ese acuerdo, que permite a los equipos de la Alianza trabajar para colocarse en los próximos años entre los tres principales fabricantes de automóviles del mundo.
