comscore

Audi A3 Sportback TDI Ultra. No harás amigos en las gasolineras

Quienes nos sigan con fidelidad recordarán que en los últimos meses han pasado por nuestras manos diversas versiones económicas del grupo Volkswagen dotadas del motor diésel 1.6 TDI en su reciente evolución de 110 CV. Han sido, en concreto, el Seat León Ecomotive con las carrocerías de cinco puertas y familiar ST, y el Volkswagen Golf BlueMotion. En todos tuvimos que descubrirnos ante el consumo de unos coches que figuran en el pelotón de cabeza de los compactos ahorradores, pues anuncian una media de risa y, en la práctica, bajan de 5 litros, magnífico dato para modelos de su tamaño con una mecánica cuya cifra de potencia es ya interesante.

Con dos carrocerías, pero un sólo cambio

Audi también dota del 1.6 TDI 110 al nuevo A3. Lo hace en las versiones «normales», que homologan 3,8 litros con la caja manual de seis marchas y 3,9 con la S tronic automática de siete, pero lo hace también en el A3 Ultra -la firma de Ingolstadt llama así a la variante menos «sedienta» de cada modelo-, disponible con las carrocerías de tres y cinco puertas, que anuncian respectivamente 3,2 y 3,3 litros de media. En ambos casos con transmisión manual, pues no hay un A3 TDI Ultra S tronic; igual que no hay Golf BlueMotion o León Ecomotive con caja automática DSG.

Esta vez nos centraremos en el A3 Ultra de cinco puertas, más lógico (pese a costar 1.320 más que el de tres puertas, que no es poco) por sus dos puertas extra, que garantizan el cómodo acceso a la segunda fila, y sus siete centímetros más de longitud, de los que cuatro corresponden al alargamiento de la distancia entre ejes, que gana espacio para las piernas en las plazas traseras (el A3 de tres puertas no anda sobrado ahí), aunque el voluminoso túnel central sigue molestando al quinto ocupante.

La zona de equipajes también es mejor: 380 litros, cuando la variante «corta» ofrece 365. El maletero del A3 Sportback es amplio y regular, y bajo el suelo podremos colocar alguna cosa porque las versiones Ultra no llevan (ni pueden llevar) rueda de repuesto. En su lugar, un kit reparapinchazos que ocupa poquito pero no siempre garantizará nuestra movilidad. ¿Se nota que no nos gustan?

Un interior de calidad

Si seguimos con el repaso del habitáculo debemos abrir paréntesis para alabar la atmósfera que se respira en el interior. Ni Serie 1, ni Clase A, ni Golf… el A3, hoy por hoy, ofrece la mejor calidad percibida en el segmento de los compactos, pues los materiales son de primera, el acabado es impecable, todos los mandos tienen buen tacto y no se perciben «grillitos» sobre mal firme. El concepto de calidad va más allá, pues se refiere también a la precisión de la instrumentación, a cómo suenan las puertas al cerrar o al preciso funcionamiento de los asistentes de seguridad (opcionales muchos de ellos), como la función automática que cambia entre luces «cortas» y «largas», que opera con la agilidad de un buen conductor.

Los A3 Ultra sólo se vinculan al acabado Attraction (el más sencillo de los ofrecidos en la gama), aunque en su equipamiento hay peculiaridades, como la citada ausencia de rueda de repuesto de emergencia, la utilización de llantas de acero y no de aleación ligera, el uso de neumáticos de baja resistencia a la rodadura o la presencia de detalles que mejoran la aerodinámica, como bajos carenados, faldones laterales del paquete exterior S line o suspensión deportiva, que rebaja la altura 15 milímetros. Hay menos opciones que en un A3 Attraction convencional, pero sigue habiendo bastantes y podremos completar el coche con tapicería de cuero, alarma, faros de xenón o led, airbag laterales traseros, sensores de lluvia y oscuridad, asientos calefactables, butaca del conductor con ajuste eléctrico, sensores de parking, climatizador bizona o, incluso, Audi Drive Select, que permite elegir entre cuatro programas de conducción (Efficiency, Comfort, Auto y Dynamic) y suma uno más (el Individual, para personalizar la respuesta del acelerador y el tacto de dirección) si montamos la opción MMI Plus. Vemos interesante, por ejemplo, el paquete Essence, que por 785 euros suma llantas de aleación (conserva la medida de neumáticos 205/55 R16), bluetooth, control de crucero Tempomat y equipo de audio MMI con pantalla a color.

Unas prestaciones interesantes

En el plano dinámico, señalar que la actitud general es noble y eficaz, y que el comportamiento está por encima de lo requerido por un diésel de 110 CV al que unos desarrollos de cambio ahorradores (sexta de 57,7 km/h por cada 1.000 rpm) lastran sus reacciones. Así, la frenada es satisfactoria (54,2 metros desde 120 km/h) y la estabilidad es buena, pues convence el moderado balanceo o el agarre de los Michelin Energy Saver.

La aceleración se ha alejado cinco décimas de la anunciada (de 0 a 100 km/h le hemos medido 11,2 segundos) y las recuperaciones son sólo correctas (9,3 segundos para pasar de 80 a 120 km/h en cuarta y 16,3 en sexta), aunque el A3 Ultra resulta agradable (el motor responde bien entre 1.400 y 4.200 vueltas) y nos premia con un gasto real «casi» de récord: 4,8 litros en nuestro recorrido mixto. Lo de «casi» tiene su explicación, pues el Golf BlueMotion consumió lo mismo y el León Ecomotive se conformó con 4,5 litros. ¡Vaya mecheros!