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Evita romper el embrague de tu coche con estos consejos

El embrague es una pieza elemental en la mecánica de los automóviles. Localizado entre el motor y las ruedas, esta sometido a los esfuerzos de la fuerza motriz que genera el motor del coche y requiere de un uso adecuado para no averiarlo o que sufra un desgaste prolongado y anticipado.

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Acción real desde la combustión

reparto de la fuerza motriz gracias al embrague

Al pisar el acelerador del coche se administra combustible y aire a los cilindros. La combustión, por expansión desplaza los pistones que adheridos a las bielas mueve el cigüeñal, creando el movimiento giratorio. Este ultimo esta unido al volante motor del embrague que recibe el movimiento desde el primero. Cuando se acopla el disco de embrague a este volante, la fuerza es transmitida al eje, en el que se encuentra el plato de presión que aplica la fuerza necesaria par llevar todo este empuje a las ruedas.

Hay tres posiciones dentro del funcionamiento del embrague, estas son:

  • Posición de embrague: Es cuando el disco está acoplado, transmitiendo así la potencia por completo y vinculándola a las ruedas y al motor.
  • Posición de desembrague: Es cuando se pisa el pedal de embrague, por lo tanto el disco se encuentra desacoplado. En esta posición se deben realizar los cambios en la marcha.
  • Posición transitoria: Es la fase entre las dos posiciones anteriores, donde el embrague se ocupa de suavizar los choques mecánicos para que el cambio en la marcha no se realice bruscamente ni la inercia genere daños en el motor o la caja de cambios.