Aunque McLaren ofrece un parabrisas delantero opcional, el Elva está diseñado con una aerodinámica que hace que el aire entre por la parte inferior del vehículo y salga expulsado a gran velocidad por la boca que presenta el capó del vehículo haciendo así que el aire pase por encima de las cabezas de los ocupantes del deportivo y convirtiéndose en una especia de parabrisas virtual o concha.