Con el augurio de un nuevo dominio de Mercedes y la esperanza de que Ferrari plante cara al equipo alemán. Tercer año de la nueva era híbrida, la rígida competitividad de los monoplazas determinada por sus motores condicionará en buena medida el rendimiento de los pilotos. Por ello, el enfrenatmiento entre compañeros de equipo durante 2016 será un factor detrminante para la valoración final de cada uno.