Encender el aire acondicionado del coche en verano es algo que no podemos evitar cuando comienzan a subir las temperaturas… pero también genera muchas peleas. «No lo pongas todavía que al coche le cuesta salir», «¿Por qué casi no enfría?», «Quítalo que va a gastar mucho»… Es en este último caso en el que nos vamos a centrar. Tan común como impertinente.
Y es que el aire acondicionado es necesario, porque no solo busca que nos sintamos frescos, sino que también es una cuestión de pura seguridad. La temperatura del coche debe estar equilibrada para que nuestro cerebro funcione adecuadamente a la hora de conducir. De hecho, muchos de los accidentes que ocurren en verano están relacionados con los grados a los que llega el interior del coche.
4Activa la recirculación
En el momento en el que el coche haya llegado a la temperatura que queremos, lo mejor que puedes hacer es activar la opción de recirculación del aire. ¿Qué se puede ganar con esto? Sencillamente, va a hacer que todo el aire que hay en el ambiente se reparta por el vehículo. Tanto es así que incluso los que van en los asientos de detrás, los grandes olvidados del aire, podrán gozar de una buena temperatura para que no haya quejas y lamentos durante el viaje.
