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Aire acondicionado: cómo usarlo sin gastar más combustible

Encender el aire acondicionado del coche en verano es algo que no podemos evitar cuando comienzan a subir las temperaturas… pero también genera muchas peleas. «No lo pongas todavía que al coche le cuesta salir», «¿Por qué casi no enfría?», «Quítalo que va a gastar mucho»… Es en este último caso en el que nos vamos a centrar. Tan común como impertinente.

Y es que el aire acondicionado es necesario, porque no solo busca que nos sintamos frescos, sino que también es una cuestión de pura seguridad. La temperatura del coche debe estar equilibrada para que nuestro cerebro funcione adecuadamente a la hora de conducir. De hecho, muchos de los accidentes que ocurren en verano están relacionados con los grados a los que llega el interior del coche.

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Usa el aire sin gastar más: Dirigir las tomas del aire hacia arriba

El aire frío va hacia abajo y el caliente hacia arriba. Máxima de física que no admite discusión, dado que el aire frío pesa más. Por ello, es recomendable orientar las salidas del aire acondicionado hacia arriba para que el peso del aire frío haga que este caiga hacia abajo y mejore así la temperatura global de todo el coche. De lo contrario siempre estarás haciendo lo mismo y no combatirás la masa de aire caliente, que es realmente lo que te interesa fundamentalmente.