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10 tecnologías del automóvil que han resucitado

Los automóviles más avanzados de la actualidad ofrecen tecnologías y elementos con los que nuestros antepasados ni siquiera podrían haber soñado. ¿O no es así?


Es cierto que los conductores de hace más de treinta años no podían imaginar que los coches adoptarían ciertas tecnologías que hoy están extendidas en la mayoría de modelos. Poder contar en su día con sistemas que hoy vemos implementados en nuestros coches.

Pero muchos de estos sistemas y elementos que se han recuperado en la actualidad tienen su origen hace muchos años. De hecho se utilizaron en su tiempo para desaparecer y más tarde volver evolucionados. Muchos de los dispositivos que consideramos nuevos e innovadores ya se habían utilizado años antes.


A menudo, esos elementos fallaron porque la tecnología no era lo suficientemente avanzada para que funcionaran de manera adecuada o fiable. Pero con los medios tecnológicos actuales, esas ideas han tenido una segunda oportunidad. Aquí hay 10 tecnologías e ideas que han regresado de entre los muertos.


Turbocompresor

BMW 202 turbo Motor16


Casi no hay un automóvil de combustión a la venta ahora que no use el poder de los gases de escape para meter más aire en su motor. Pero cuando GM abandonó su breve experimento de principios de la década de 1960 para dar al Oldsmobile F-85 Jetfire y al Chevy Corvair Monza un rendimiento equivalente al de motores mucho más grandes, pasaron años antes de que se convirtiera en una tecnología habitual.


La entrada del turbo a escena de manera generalizada volvió para aumentar la capacidad de coches de carácter deportivo. Automóviles como el BMW 2002 Turbo de 1974 y el Porsche 911 Turbo de 1975. Y luego de manera masiva en los motores diésel, con el Mercedes-Benz 300SD de 1978.


La inducción forzada en los coches de gasolina se hizo habitual en los motores downsizing en la búsqueda de la eficiencia sin perder rendimiento. El Grupo VW lanzó su motor de 1.8 litros a mediados de la década de 1990 y lo puso en casi todas sus marcas. Pero fue desde la década de 2010 cuando los coches sin turbocompresor eran minoría.