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Amalgam Collection: El arte de las cosas pequeñas

Para entender el gran valor de algo tan pequeño como las miniaturas de Amalgam Collection hay que pensar en grande. Un Mercedes-Benz 300 SLR Uhlenhaut alcanzó en 2022 un precio de 135 millones de euros, el reloj Graff Diamonds Hallucination se vende por 50 millones, y la pluma estilográfica Fulgor Nocturnus de Tibaldi cuesta 7,4 millones. Con esto en mente, ¿cuánto pagarías por una de estas miniaturas?

Amalgam Collection Ltd. nació en 1985 para crear maquetas de proyectos arquitectónicos para los más prestigiosos estudios alemanes y británicos de la época, como Foster & Partners. Pronto ampliaron su negocio creando prototipos de productos para empresas como Dyson, pero la historia que hoy nos ocupa empieza en realidad cuando en 1995 Sandy Copeman –fundador y propietario de Amalgam Collection– contacta con Eddie Jordan y Gary Anderson y se materializa un encargo que cambiará el destino de la compañía para siempre. 

El propietario del equipo Jordan y su diseñador jefe serían los primeros clientes de una lista a la que pronto se sumarían nombres como Geoff Willis –célebre ingeniero británico de F1 por aquel entonces al servicio del exitoso equipo BAR Honda y desde 2011 en el equipo Mercedes AMG Petronas F1–, Luca di Montezemolo –ex presidente de Ferrari, de Fiat y de la FOTA– o Adrian Newey –el más exitoso diseñador e ingeniero de la Fórmula 1, al servicio del equipo Red Bull desde 2006–, por no mencionar una inacabable lista de pilotos de F1. 

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Los vehículos de competición son la especialidad de Amalgam Collection, que también ofrece réplicas de volantes de monoplazas de Fórmula 1, motores y “morros” de algunos monoplazas.

La obsesión de Amalgam por el detalle y la perfección de cada componente hizo que sus trabajos y su metodología encajaran perfectamente en el mundo de la Fórmula 1, y sus servicios pronto fueron reclamados por numerosos equipos y coleccionistas, lo que llevó a la compañía británica a trabajar no solo por encargo, sino también lanzando pequeñas series de sus modelos a escala. 

Amalgam Collection es una multinacional “a escala”

Nacida en Bristol (Reino Unido), Amalgam pronto vio la necesidad de ampliar sus instalaciones para atender la creciente demanda de sus modelos a escala. Así, en 2004 inauguró un taller en la ciudad china de Zhuhai que cinco años más tarde se trasladaría a Dongguan. Allí trabajan 160 personas creando patrones y herramientas, moldeando piezas y completando el acabado y el ensamblaje de muchos de los modelos de escalas 1:8 y 1:18. 

En 2015, Amalgam creó un nuevo taller en la ciudad de Pécs, en el sur de Hungría, en el antiguo emplazamiento de la fábrica de porcelana artística Zsolnay. Dotado de 40 artesanos, el equipo húngaro de Amalgam se dedica a rematar y ensamblar numerosos modelos de Ferrari y Porsche a escalas 1:8 y 1:5.

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Las réplicas a escala de Amalgam no son juguetes, sino auténticas obras de arte. Cada modelo viene impecablemente presentado, y el fabricante ofrece también urnas transparentes y pedestales. La urna de nogal iluminada para modelos a escala 1:8 cuesta unos 10.000 euros, pedestal aparte.

No obstante, Bristol continúa siendo la sede central de Amalgam Collection, y allí se crean los prototipos, proyectos especiales y modelos únicos por encargo de un valor “extremadamente alto”.

Los modelos a medida de Amalgam Collection

En el actual catálogo de Amalgam Collection puedes encontrar 250 modelos a escala de marcas como Ferrari, Porsche, Mercedes, Aston Martin, Lamborghini, Jaguar… así como numerosos monoplazas de Fórmula 1 de diferentes épocas. Aparte de la habitual escala 1:18 (cuyos modelos miden unos 25 centímetros de longitud), hay reproducciones disponibles a escalas 1:12 (alrededor de 38 cm), 1:8 (60 cm), 1:5 (96 cm) y 1:4 (en torno a 1,20 metros), así como réplicas de volantes de F1 a escala real.

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El precio de las reproducciones depende fundamentalmente de la escala y del nivel de personalización solicitado por el cliente. Los modelos de competición en los que se reproducen la suciedad y los daños con los que llegaron a la línea de meta son también sensiblemente más caros.

En cuanto a los precios, dependen de muchos factores como el número de ejemplares fabricados de un mismo diseño o su complejidad. Además, puedes encargar cualquier modelo con especificaciones exclusivas, como un color de pintura determinado, llantas, neumáticos o diferentes detalles de equipamiento; hasta las tapicerías y el color de los pespuntes pueden ser personalizados para que la miniatura sea una copia exacta del automóvil original. Incluso hay réplicas de coches de carreras en las que se reproducen la suciedad y los desperfectos con los que llegaron a meta.

Los precios de los vehículos personalizados no son públicos, pero sí podemos decirte que los modelos a escala 1:18 son los más asequibles, con tarifas de entre 1.000 y 1.800 euros. Por su parte, la oferta en escala 1:8 es la más abundante; su precio medio ronda los 22.000 euros. Finalmente, comprar un F1 a escala 1:4 te costará en torno a 38.000 euros.

Galería de imágenes de las miniaturas de Amalgam Collection