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Suzuki fabricará coches voladores en 2024… y no es broma

Antes de que el Jimny de cinco puertas llegue a Europa, parece ser que Suzuki habrá dado comienzo a la producción de coches voladores. No es 28 de diciembre ni 1 de abril; la noticia va en serio: en menos de un año, en la primavera de 2024, Suzuki Motor Corporation dará comienzo la producción de coches voladores en una de sus fábricas.

Así lo recoge un acuerdo firmado por el fabricante japonés con la empresa también japonesa SkyDrive, que establecerá una filial propia para fabricar estos coches voladores en la planta de Suzuki ubicada en la prefectura de Shizuoka (Japón).

El fabricante de automóviles colaborará con SkyDrive también durante el proceso de preparación previo al comienzo de la producción de estos coches voladores, incluyendo tareas como la búsqueda de personal. Sin embargo, según han señalado desde Suzuki, algunos términos del contrato “se seguirán discutiendo” y se “acordarán por separado”.

El presidente de Suzuki, Toshihiro Suzuki, ha declarado que está “muy emocionado” por trabajar con SkyDrive, y ha asegurado que darán “pasos ambiciosos” para desarrollar productos de un valor superior.

Los coches voladores de SkyDrive

Lo cierto es que la noticia tiene más enjundia de lo que parece, ya que SkyDrive es un interesante socio para esta misión, dado que su tecnología en materia de avión eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) es plenamente funcional, y este tipo de vehículos podría jugar un papel crucial en desplazamientos de corta distancia en un futuro inmediato.

A modo de ejemplo, cruzar de punta a punta una ciudad congestionada en unos pocos minutos a bordo de una especie de dron eléctrico gigante se antoja como una solución muy atractiva para muchos usuarios, una alternativa al helicóptero que hasta ahora sólo era posible para bolsillos pudientes.

No obstante, aunque SkyDrive ya ha desarrollado prototipos de eVTOL plenamente funcionales, aún está por solucionar el tema normativo que autorice y regule el uso del espacio aéreo para el uso de coches voladores, que será el que previsiblemente limite el desarrollo de los eVTOL o coches voladores como está ocurriendo con otros avances tecnológicos relacionados con el mundo de la movilidad, tales como la conducción autónoma de nivel 4.