La Ley de Cambio Climático promovida por el Ministerio de Transición Ecológica ha puesto en marcha la polémica implantación de determinadas áreas ZBE (Zona de Bajas Emisiones) para todos aquellos municipios y ciudades con más de 50.000 habitantes. Se trata de una medida que deberá estar vigente a partir de 2023, es decir, ya a la vuelta de la esquina.
El objetivo de esta nueva medida normativa no es otro que mejorar la calidad del aire, reduciendo los niveles de contaminación en los grandes núcleos urbanos de nuestro país, de tal forma que se restringirá la circulación y la entrada a dichas áreas ZBE a determinados tipos de vehículos. Es algo que alterará la vida normal de millones de personas en su quehacer diario… Por eso es difícil encontrar partidarios.
3Uno por uno: los damnificados de la Zona de Bajas Emisiones
Las estadísticas que maneja Avarm son tremendamente contundentes al respecto de los diferentes grupos de conductores que se verán afectados. Y es que unos 5,5 millones de vehículos en España no tienen distintivo medioambiental, denegado a todos los gasolina anteriores al 2001 y los diésel anteriores al 2006.
Pero ojo porque es que otros 5,9 millones cuentan con la etiqueta B y unos 6,1 millones, la C. En total, como comentábamos, algo más de 17 millones de vehículos podrían verse excluídos irremediablemente de las zonas ZBE. Se podría decir perfectamente que estas medidas serán discriminatorias porque no contemplan que muchos usuarios no tienen el capital necesario para comprarse un eléctrico o híbrido con los precios actuales.
