Los coches que forman el total del parque móvil nacional han sido clasificados por la DGT con el fin de cumplir con la ley de transformación energética en su lucha contra el cambio climático. Esto supone que ciertos vehículos, con la aplicación de las nuevas normas verán restringida su circulación e incluso podrían desparecer definitivamente.
3Si contaminas y sin etiqueta, no entras
La clasificación que la DGT hace de los vehículos según su capacidad de contaminación se realiza conforme a los datos de fabricación y matriculación, y atendiendo a las especificaciones técnicas en cuanto a emisiones de gases. Esto da pie a que las etiquetas pasen desde la tipo A o sin etiqueta para los coches mas antiguos y dañinos, hacia la B y la C, que son coches mas recientes y modernos, pero aun de combustión interna y finalice en la tipo 0 emisiones, que se otorga a los eléctricos y algunos híbridos.
Dejando al margen estos últimos, como parece lógico, aunque mucho se esta hablando de la polución originada en su fabricación, especialmente de las baterías, los coche que la DGT considera deberán ir desapareciendo son los sin etiqueta y los B y C.
