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El informe que demuestra que China quería acabar con Tesla, pero que podría finalizar con el adiós del fabricante de coches eléctricos más potente

La creciente penetración de la industria automotriz china en el mercado europeo ha generado un debate sobre la equidad en la competencia global. Un reciente informe del Instituto Kiel de Alemania revela que fabricantes como BYD están recibiendo subsidios considerables del gobierno chino, planteando preguntas sobre la igualdad de condiciones frente a competidores occidentales como Tesla.

Estos subsidios, que representan una proporción significativa de los ingresos de BYD, han desencadenado preocupaciones sobre prácticas comerciales desleales y han llevado a la Unión Europea a investigar la situación.

En este contexto, la incursión de empresas chinas como BYD, MG y Geely en el mercado europeo está alterando la competitividad y generando tensiones entre los actores establecidos y los recién llegados.

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Lo que preocupa a Tesla

El estudio revela que China supera con creces a otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en términos de gastos en subsidios, con un rango entre tres y nueve veces más elevado. Esto sitúa a BYD en una posición ventajosa para competir no solo en el mercado interno chino, sino también en el escenario global, lo que se refleja en su ascenso como el principal fabricante de vehículos eléctricos del mundo en 2023, superando a Tesla por primera vez.

Sin embargo, la magnitud de estos subsidios plantea preocupaciones sobre la igualdad de condiciones en el mercado internacional. La proporción de los subsidios en relación con los ingresos de BYD es considerable, representando un 3,5% en 2022, según el Instituto Kiel. Este nivel de apoyo gubernamental podría distorsionar la competencia y socavar la capacidad de otros fabricantes para competir de manera justa.