En España es obligatorio tener un seguro de coche para poder circular con él, este recibe el nombre de póliza de Responsabilidad Civil Obligatoria. Dicho seguro tiene que cubrir los daños que puedan sufrir los pasajeros del vehículo y los del otro coche implicado, si lo hubiera. Aunque esta póliza es la más básica, en los seguros a terceros ya se vienen incluyendo también otras coberturas a mayores: como la Responsabilidad Civil Voluntaria, la Asistencia en Viajes, etcétera.
No hay que perder de vista la importancia de estar cubiertos en caso de accidente. Sobre todo, no hay que dar por hecho que el seguro te va a cubrir siempre cualquier daño. Hay ciertas situaciones en las que la aseguradora no te cubrirá ningún daño.
¿Qué ocurre en caso de accidente?
Por suerte, son pocos los casos en los que un conductor tiene que recurrir a su seguro de accidentes de tráfico. Pero aun así es vital contar con él cuando ocurre algún percance. Según el seguro que hayas contratado te cubrirá más daños o menos. Pero tienes que saber que, independientemente de tu póliza, hay situaciones en las que el seguro no te cubrirá.
¿Cuáles pueden ser estas circustancias? Pues sobre todo imprudencias por parte del conductor ante las que el seguro se lavará las manos si acaban en accidente. Por ejemplo si se prueba que el conductor iba borracho o bajo los efectos de las drogas.
