El fabricante alemán Roland A. Bussink ha creado esta impresionante maravilla de la ingeniería, una criatura que según apunta está inspirada en los míticos Mercedes McLaren SLR Stirling Moss, aunque este Bussink GT R SpeedLegend, que es como en realidad se llama, también sigue los pasos de la que parece ser la moda del momento entre los apasionados de las cuatro ruedas, en la que se ofrecen creaciones de edición limitada y con un nexo de unión claro: la ausencia de luna delantera. Y aquí nos encontramos con verdaderas obras de arte como los Aston Martin V12 Speedster, Ferrari Monza SP1 y Monza SP2 o McLaren Elva.
Para crear este GT R SpeedLegend, Bussink toma como punto de partida un deportivo poderoso y exclusivo a la par, porque hablamos de un Mercedes-AMG GT R Roadster, de los que como sabrás, solo se van a fabricar 750 unidades. Y tan solo cinco de ellos tendrán el privilegio por pasar por las manos de Bussink, quien colabora con HWA AG para su construcción, que se hará de forma totalmente artesanal.
Con un 'halo' a lo Fórmula 1
Lo primero que llama la atención en su exterior es el arco de seguridad que denominan Speedbow, que sirve de separación entre sus asientos y que llega desde los arcos de seguridad traseros, hasta adelantar a la diminuta luna que han colocado para derivar el aire por encima de la cabeza de sus ocupantes. Para diseñar este Speedbow, Bussink se ha inspirado en el 'halo' que actualmente usan los monoplaza de Fórmula 1, además de que lo fabrica con fibra de carbono, cuenta con iluminación ambiental por su parte inferior, diferentes botones para las luces de cortesía y sobre el cuelga el espejo retrovisor interior.
A la medida de este GT R SpeedLegend se han construido otros muchos detalles, como las rejillas de fibra de carbono que ahora lucen sus aletas delanteras, sin pasar por alto el detalle de que como podrás imaginar, su techo de lona de accionamiento eléctrico se ha eliminado de un plumazo.
Pesa 100 kilos menos y tiene 265 CV más
Ese detalle les ha permitido a Bussink ahorrar 100 kilos de peso respecto a un Mercedes-AMG GT R Roadster, de forma que eso ya será un gran aliciente para ofrecer unas prestaciones aún más sensacionales, aunque Bussink no ha desvelado estas nuevas cifras.
Si que te diré que el vehículo donante es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3,6 segundos y de alcanzar los 317 km/h.
Estas cifras van a quedar ridiculizadas por este Bussink GT R SpeedLegend. Y no precisamente por su dieta de adelgazamiento, sino porque el 4.0 V8 Biturbo ha sido debidamente mejorado para pasar de 585 a 850 CV de potencia. Y con eso está todo dicho.
Este artesanal fabricante que tiene su cuartel general en Affalterbach, justo al lado de las instalaciones de AMG, dice que solo fabricará cinco unidades, que se podrán personalizar al gusto del cliente. Y no hace falta que corras, porque todas están adjudicadas.