Todos los propulsores de gasolina, que van desde los 90 a los 190 CV, incorporan inyección directa y turbocompresor. La gama arranca con dos bloques 1.0 TSI de tres cilindros de 90 y 110 CV. El nuevo León cuenta con dos motorizaciones TDI de 2 litros de última generación. La primera opción, disponible en carrocerías 5 puertas y Sportstourer, es el 2.0 TDI de 115 CV. La segunda opción, un 2.0 TDI de 150 CV, con cambio automático DSG o manual. Ambos diésel se benefician de un nuevo sistema de reducción catalítica SCR de dosificación doble, que realiza una inyección doble de AdBlue para reducir las emisiones de NOx.