La última generación del Subaru Impreza no es de los vehículos compactos más veteranos del mercado. Ni mucho menos. Aún así, la firma nipona ha decidido actualizar su imagen exterior, y ya lo ofrece en Japón.
Los diseñadores de Subaru han revisado las formas de sus faros delanteros, que pueden tener tecnología Full LED, la parrilla frontal se vuelve más delgada y también varían las líneas de su paragolpes, donde se colocan nuevos embellecedores para los faros antiniebla. Y serán cosas mías, pero reconozco que me recuerda en exceso al desaparecido Toyota Auris.
También llegará a Europa
Si bien, hay que decir que en el resto de su carrocería (recuerda que en otros países se ofrece en Hatchback y Sedán) no hay cambios estéticos, salvo la introducción de nuevas llantas y también nuevos colores.
Una vez dentro Subaru aprovecha la ocasión para actualizar su sistema de infoentretenimiento y también para variar algunos mandos de la climatización. Aquí no acaba la cosa, porque ahora luce nuevas molduras en negro brillante y equipa al asiento del conductor con función memoria, que también regula sus espejos retrovisores.
De serie ahora todos los Subaru Impreza equipan el sistema de seguridad activa Eyesight Touring Assit, mientras que su gama de propulsores permanece sin cambio alguno. Y hay que recordar que en Japón están disponibles con dos bloques de gasolina, atmosféricos y de cuatro cilindros bóxer, que tienen 1.6 y 2.0 litros, y que proporcionan 115 y 155 CV de potencia respectivamente. Como no podía ser de otra manera en la firma nipona, de serie apuestan por su sistema de tracción total Symetrical All Wheel Drive y se combinan con un cambio automático del tipo CVT.
Aunque no han dicho nada al respecto, se rumorea que Subaru también ha actualizado el tarado de sus suspensiones y el tacto de su dirección para mejorar su comportamiento dinámico.
