En septiembre de 2013, cuando Peugeot lanzó al mercado la nueva generaciòn del 308, había unos cuantospilares sobre los que quería basar el éxito de su modelo; la innovación, la tecnología, la eficiencia… Pero hacían gran hincapié en otro: la calidad. Querían dar el salto respecto a las marcas generalistas y apuntar a los modelos premium de su segmento. Una calidad que tenía que verse a simple vista; desde el primer minuto pero permanecer con el paso del tiempo.
Por ello, la marca francesa ha trabajado en diferentes aspectos, en la mejora de los materiales y la fabricación; en la resistencia mecánica y el confort en marcha; pero también en la experiencia de cliente; en el trato en el concesionario o el servicio oficial.
50 coches probados en pista cada día
Era una apuesta a medio plazo y en la que había que medir resultados con el tiempo. Pero había que ponerse manos a la obra desde el principio. Un trabajo incesante que ha dado para algunas cifras con las que medir la dimensión del esfuerzo de calidad realizado por la marca francesa. Cifras, que, por cierto, se van a convertir en estándar en los próximos lanzamientos de la marca. Por ejemplo, antes del lanzamiento del 308 ya se habían realizado 1.500 horas de test en banco de pruebas que simulan el trabajos de la amortiguación durante 60.000 kilómetros. Otras 1.500 horas con pruebas bajo diferentes condiciones climatológicas o 2,5 millones de kilómetros recorridos por 1.000 conductores (profesionales y no profesionales) al volante de 200 coches. Además, cada día se someten a controles de calidad en pista a 50 coches.
Son algunas de las cosas que hemos podido ver durante una visita a las instalaciones del Grupo PSA en Belchamp, el centro técnico donde se desarrollan y ponen a prueba todos los nuevos modelos de las tres marcas que lo integran. Un centro en el que trabajan 1.138 personas (un 41 por ciento de ellos ingenieros) que cuenta con 25 pistas de pruebas diferentes y más de 1.400 instalaciones para realizar todo tipo de tests.
Y en ese trabajo, las máquinas son vitales, pues permiten acelerar un proceso que no sería posible reproducir de otra manera. Por ejemplo, el 308 pasa por una prueba en un simulador de suspensiones en el que se pueden reproducir temperaturas de entre -40 y 50 grados, o la insolación que recibe el coche para comprobar la resistencia en todo tipo de condiciones. En 6 semanas de trabajo en este simulador reproduce el trabajo de 240.000 kilómetros.
Un robot que se 'sienta' 30.000 veces
Otra prueba que realizan las máquinas es la resistencia y durabilidad de los asientos, tanto de la estructura como de la tapicería. Un robot simula la entrada y salida de una persona en 20.000 ocasiones para comprobar la resistencia del asiento y 30.000 para medir el respaldo). Puedes ver cómo trabaja en el siguiente vídeo.
Pero no sólo las máquinas reproducen en laboratorio las condiciones de uso de un coche. Las carreteras, sobre todo las que están en mal estado, son el mejor escenario para saber si el coche se comportará. Y así, varios Peugeot 308 rodaron durante 60.000 kilómetros por países como Rumanía o Marruecos, con una red manifiestamente mejorable. Y tras desmontar totalmente esas unidades, el resultado ha sido muy satisfactorio.
Una satisfacción que demuestran los clientes de Peugeot, que realiza anualmente 1,7 millones de entrevists a conductores de todo el mundo; conductores que sobre todo valoran la calidad en el uso, en el día a día de su Peugeot. Y de sus opiniones, así como de los resultados obtenidos durante las diferentes pruebas, Peugeot ha ido introduciendo mejoras o solucionando problemas en el coche. Porque la mejora de cada modelo es un proceso continuo.
Los 50.000 km de Motor16 como ejemplo
La última parte de nuestra visita se centró en analizar en circuito el comportamiento de varios Peugeot con miles de kilómetros a sus espaldas y compararlos con coches nuevos para comprobar cómo ha evolucionado. Y ahi la percepción es que el 308 aguanta perfectamente el paso del tiempo. Como nosotros bien sabemos, pues en nuestra prueba de50.000 kilómetros con el Peugeot 308 -que fue una de las referencias citadas por los responsables de Peugeot para este estudio sobre calidad- ya pudimos comprobar que la calidad del coche no cambia ni con el paso del tiempo ni con los kilómetros.
Decíamos al principio que esta carrera de la calidad era una apuesta a medio plazo. Pero en Peugeot ya han analizado y pueden cuantificar cómo va la carrera. Y parece que la apuesta está en el buen camino, tanto desde el punto de vista de la opinión de los consumidores, que perciben como coche nuevo el Peugeot 308 a los tres años de vida, como desde el punto de vista del valor de tasación. En Peugeot y en general en todas las marcas, la referencia siempre ha sido el Volkswagen Golf. Pero el 308 se ha situado por encima del Golf en valor de tasación en Francia o Italia y casi a la par en Inglaterra.
El esfuerzo por la calidad da sus frutos.