Los accidentes de superdeportivos no son una rareza en el mundo automotriz, pero lo que sí resulta inusual es que el conductor implicado tenga tan solo 13 años de edad. Esta situación es precisamente la que se vivió recientemente en West Vancouver, Canadá, donde un Lamborghini Huracán quedó destrozado en un accidente nocturno con un niño detrás del volante.
El incidente tuvo lugar alrededor de las 11 de la noche del 25 de marzo, cuando la policía respondió a un llamado sobre un accidente de un solo vehículo en la autopista Trans Canada. Al llegar al lugar, se encontraron con este coche de la firma italiana completamente rojo, gravemente dañado y sin pasajeros a la vista. La búsqueda del conductor para encontrar al culpable llevó a los oficiales a identificar a un chiquillo que no llega a los 14 años.
¿Cómo fue qué sucedió el accidente del Lamborghini Huracán conducido por un niño?
Según el sargento Chris Bigland del Departamento de Policía de West Vancouver, el preadolescente y un amigo decidieron llevar el Lambo a dar una vuelta, pero perdieron el control debido a las malas condiciones de oscuridad y lluvia que había en la carretera. Las imágenes son impactantes y parece un milagro que no haya habido víctimas fatales.
Como dijimos, afortunadamente no hubo que lamentar heridos en el accidente, tanto los que estaban adentro del habitáculo del Lamborghini Huracán como también de personas que circulaban por esa vía. El que sí sufrió daños graves fue el superdeportivo que terminó con la pérdida del clip delantero, un faro completo y otros daños bastante notables en varias partes del vehículo.
¿Qué consecuencias tendrá el niño de 13 años que conducía?
El propietario del automóvil cooperó con la policía para localizar a los ocupantes, y aunque el incidente pudo haber sido una travesura de niños, el joven conductor ahora enfrenta cargos graves, que incluyen exceso de velocidad, conducción descuidada y operación de un vehículo sin licencia. Hubo un caso similar en Estados Unidos, en donde otro niño de 13 años provocó 12 heridos graves al robar un coche.
Aunque pueda resultar una anécdota divertida para contar en el futuro, este incidente destaca la importancia de la responsabilidad con el cuidado de nuestros niños en relación con los vehículos que tienen a mano. Sobre todo cuando hablamos de un Lamborghini Huracán, un superdeportivo que puede alcanzar velocidades que terminan convirtiendo en fatal a cualquier accidente.
