Si un conductor supera el clásico margen de 20 kilómetros por hora del límite de velocidad adelantando en una carretera nacional le multan con 100 euros, si se coge el teléfono móvil con la mano mientras se conduce supone una sanción de hasta 200 euros por parte de la DGT, llevar algún tipo de dispositivo de detección de radares al volante conlleva 500 euros… Tenemos claros muchos ‘multazos’, fruto de la nueva ley de tráfico, que nos pueden poner, pero otros quizá no tanto.
Hay un sinfín de circunstancias distintas cuando uno va al volante, miles de supuestos variopintos y tan remotos como acciones se pueden llevar a cabo en el coche, es decir, casi infinitas. Los miembros de la Guardia Civil y de las distintas policías locales podrían escribir un libro explicando miles de motivos por los que han tenido que poner una multa. Pero antes de que dejes volar tu imaginación, vamos a dar con los más comunes.
3En pareja o solo… no puedes comer conduciendo
Comer mientras conduces tampoco está exento de una multa… Y mira que a veces volvemos hambrientos del trabajo y caemos en la tentación de pegarle un mordisco a lo primero que tenemos a mano, pero no. Da igual que sea durante un atasco o que hayas aprovechado un momento el semáforo en rojo. Se considera una distracción por la que perderás 2 puntos del carnet y 200 euros, así que aguántate las ganas para cuando llegues a casa.