El próximo 11 de enero abre sus puertas el Salón de Tokio, el escenario elegido por Mazda para mostrar al mundo entero diferentes novedades para algunos de sus modelos más exitosos. Muchas de esas novedades que veremos en cuestión de semanas atañen a la estética de sus vehículos con el fin de potenciar la deportividad de estos.
Para comenzar, el recién estrenado Mazda3 podrá equiparse en un futuro no muy lejano con un llamativo paquete deportivo para su exterior. Compuesto por un discreto splitter delantero, faldones laterales, un alerón posterior más pronunciado y un difusor trasero específico, todos estos elementos están acabados en color negro brillante y hacen juego con sus nuevas llantas BBS de 18 pulgadas.
Es muy probable que Mazda revise también la suspensión para hacerlo más deportivo, de igual forma que en su habitáculo lucirá pedales metálicos y alfombrillas específicas.
Mejoras para CX-5, CX-8 y MX-5
En Tokio también mostrará versiones modificadas de sus CX-5 y CX-8, que también van en consonancia con lo visto en el Mazda3 tanto en el exterior como en el interior de ambos modelos.
Más llamativo aún es el Mazda MX-5 Drop-Head Coupé, un vehículo que será presentado como un prototipo en el que destaca un techo rígido que han fabricado en fibra de carbono.
Este elemento no es innovador en la última generación de este exitoso roadster, pues los Mazda MX-5 Cup, las versiones de competición, lo ofrecen como opción por medio de Mazda Motorsport. El principal inconveniente es que están pidiendo 4.100 euros por el.
Tampoco nos sorprende tras ver este Abarth 124 Spider GT. Recuerda que este roadster 'italiano' es el clon del roadster de Hiroshima, pero esta edición especial añade a su dotación de serie un techo de fibra de carbono que se puede poner y quitar de forma sencilla, y mantener su capota de lona. En este 124 Spider GT dicen que pesa sólo 16 kilos, tiene luna trasera de cristal y térmica, y que no afecta al reparto de pesos de este deportivo. Imaginamos que en el MX-5 irá por el mismo camino.
Con el fin de acentuar su deportividad, Mazda añade a este prototipo unas llantas RAYS de 16 pulgadas, un splitter delantero, faldones laterales… No desentona el gancho de rescate en color rojo para el frontal, unos deportivos asientos Recaro, pedales metálicos, un nuevo volante, así como un nuevo sistema de admisión para el motor Skyactiv-G o un diferencial trasero de deslizamiento limitado.