Como está sucediendo con muchos modelos, el LS de Lexus se ve sometido a un pequeño retoque estético y en varios campos más con el fin de comenzar 2021, y su ciclo medio de vida, con energías renovadas.
Siguiendo los pasos del nuevo IS
Este nuevo modelo adopta una filosofía de diseño parecida a la que ya vimos con el renovado IS, con una parrilla delantera más definida, con un color nuevo que la rodea y unos faros delanteros con tres luces que le dan un aspecto mucho más moderno al frontal del vehículo. Además, también se le han añadido detalles en cromado en la zona inferior y unas nuevas entradas de aire rediseñadas.
En la zona posterior, sin embargo, los cambios son de menor calado y prácticamente inapreciables, salvando unas nuevas luces posteriores LED con una firma luminosa distinta y unos detalles en negro brillante. Como añadido también tendrá unas nuevas llantas de 20 pulgadas para el modelo F-Sport, que gozará de una parrilla en un color específico también.
Si damos paso al interior, aquí el lujo y la presencia del LS siguen intactos y se incorpora una nueva pantalla central de gran tamaño que crece hasta las 12,3 pulgadas y que cuenta con el último sistema de infoentretenimiento de la compañía, compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Entre los demás cambios que se aprecian aquí dentro encontramos que los botones del volante ahora son de color negro y que los nuevos botones para los asientos calefactables, así como para el volante, se encuentran ahora en la consola central.
Pero no todo es puramente visual, Lexus ha trabajado mucho en conseguir mejorar todavía más el confort y la sensación de paz del coche. Se ha enfocado mucho en reducir ruido y en darle al usuario una experiencia de viaje única. La suspensión también ha sido revisada con el mismo fin, hacer de cada viaje un gozo.