El Dacia 1300 era en los años 70 y los 80 el verdadero coche del pueblo en Rumanía que permitió motorizar a uno de los países más pobres de Europa. Hoy se ha convertido en pieza de coleccionista, como la unidad del Dacia 1300 de Mihai, que anteriormente perteneció a su padre y ahora ha sido completamente restaurado.
3Dos generaciones
Los principales cambios de diseño entre el 1300 y el 1310 afectaban a los faros delanteros y traseros, el resto era exactamente igual. El 98% de los componentes se fabricaban en Rumanía, por lo cual el stock es muy abundante y Mihai no tuvo el menor problema para encontrar las piezas necesarias, siempre con la ayuda de clubs de aficionados al modelo.
Pero el 1310 es más que un coche para Mihai. En él aprendió a conducir, y a la vez fue el coche con el que se iba de vacaciones la familia al completo recuerdos ahora imborrables que viajan a bordo del Dacia.
A día de hoy su contador de kilómetros marca 3.400 kilómetros, pero tiene truco; pues se pone a cero a los 99.999. Y ya lleva tres vuelta completas de marcador.
A día de hoy se cuentan más de 2 millones de unidades vendidas durante los 35 años que estuvo en producción. E incluso llegó a compartir vida comercial con el Loga, el primer modelo de la nueva Dacia. Se exportó a África, Oriente Medio y Latinoamérica.