La Dirección General de Tráfico (DGT) ha intensificado los controles de velocidad en las carreteras españolas con 122 nuevos radares que se van a instalar a lo largo de todo este año. Ya hay algunos fijos y de tramo funcionando, y el resto lo harán en este segundo semestre del año.
Al margen de los radares fijos, la DGT aumenta la vigilancia en momentos puntuales con radares móviles y también con la vigilancia aérea con el helicóptero Pegasus. En el caso de los radares fijos, la DGT está obligada a señalizarlo en las carreteras y notificarlo en los navegadores, pero no ocurre lo mismo con los móviles. Por eso, hay muchos conductores que buscan soluciones para saber dónde están esos controles policiales y evitar multas.
Acudir a aplicaciones como Waze, Social Drive o Radares Fijos y Móviles es lo más habitual, porque su comunidad de usuarios notifica absolutamente todo lo que ocurre en la vía. Sin embargo, hay quien prefiere un método más ‘profesional’ con un dispositivo físico que está diseñado para alertar de la presencia de radares. ¿Son legales? ¿Qué dice la DGT al respecto?
El dispositivo que cada vez se utiliza más en España

Uno de los dispositivos que más terreno ha ganado en los últimos meses entre los conductores es el Ooono Co-Driver Nº1, un pequeño aparato que se instala fácilmente en el salpicadero y se conecta al móvil vía Bluetooth. Su funcionamiento es bastante sencillo, pues se encarga de emitir alertas sonoras y visuales cuando se aproxima un radar, una incidencia en la vía o un control de tráfico. Lo hace gracias a una base de datos ‘alimentada’ por una comunidad de usuarios, así que esos avisos en tiempo real son bastante fiables.
No es un detector activo en sí, sino un avisador de radares que no capta señales de radar por sí mismo, sino que informa basándose en los datos compartidos. Es exactamente la misma tecnología que utilizan aplicaciones como Waze o Coyote, pero con la ventaja de no tener que mirar la pantalla del móvil o del coche.
La popularidad del Ooono Co-Driver Nº1 ha crecido, sobre todo entre quienes realizan trayectos diarios por carretera y buscan un dispositivo para saber dónde están los radares de la DGT. Sin embargo, también existe una versión más avanzada, el Ooono Co-Driver Nº2, que sí incorpora funciones de detección activa de radares y cuyo uso puede acarrear sanciones importantes.
¿Es legal? Esto es lo que dice la DGT al respecto

La DGT distingue perfectamente entre avisadores, detectores e inhibidores de radar. Y tienes que conocer la diferencia entre ellos para no cometer una infracción sin ser consciente. Como siempre insisten desde Tráfico, no conocer una norma no te exime de su cumplimiento.
- Avisadores: son completamente legales por la DGT. Utilizan bases de datos públicas o información de usuarios para advertir de la presencia de radares fijos o zonas de riesgo. Pueden ser aplicaciones como Google Maps, Waze o dispositivos como el Ooono Co-Driver Nº1. La normativa actual permite su uso sin restricciones.
- Detectores: están prohibidos. Captan ondas electromagnéticas emitidas por los radares, tanto fijos como móviles. Aunque su uso parezca inofensivo, la ley contempla sanciones incluso si llevas el dispositivo en el coche apagado. La multa es de 200 euros y la pérdida de 3 puntos del carné de conducir.
- Inhibidores: suponen la infracción más grave. Estos aparatos interfieren o bloquean directamente el funcionamiento del radar, impidiendo que detecte el vehículo. Utilizarlos puede suponer una multa de hasta 6.000 euros, la pérdida de 6 puntos y la inmovilización del vehículo.
Por tanto, si estás pensando en llevar cualquiera de estos dispositivos, deberías conocer bien las diferencias y saber qué es lo que permite o no la DGT.