Si quieres mantener tu coche sano, limpiarlo es sinónimo de garantizarlo. Algunos dicen que «la limpieza Dios la amó» otros que «no es más limpio el que más limpia, sino el que menos ensucia», pero la idea es clara. Y no solo hablamos de limpiar el coche por fuera, no. Sino también por dentro, en su motor y en todos sus componentes.
Parece una tarea titánica, ¿no? Pero la limpieza de un coche, y en particular del motor, es esencial para llevar a cabo un correcto mantenimiento. Precisamente, el propulsor de todo vehículo es uno de los eternos olvidados para cualquier usuario. ¿Cuántas veces te ha dado por revisarlo en los últimos años?
4Retira el producto
Llegó el momento de retirar el producto. Para ello usa una máquina de vapor a presión. No todo el mundo tiene una a mano así que puedes apañarte también con un trapo húmedo. Eso sí, nunca debes usar agua del grifo. Emplea agua destilada, ya que no conduce la electricidad. Para curarte en salud, evita no pasar zonas con componentes eléctricos.
Un consejo más concreto para los colectores de escape. Si hay mucha suciedad acumulada, puedes emplear una lija especial para obtener un mejor resultado. Hay gente que, incluso, utiliza un limpia hornos con esta finalidad. No te arrepentirás.