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Caja negra y limitador de velocidad: así serán los coches del futuro

Va a tardar en extenderse, su llegada será paulatina, debemos tener paciencia… pero ya es oficial. Después de meses informando sobre las nuevas normas y los sistemas ADAS en el automóvil, desde el miércoles día 6 de julio, entró definitivamente en vigor el nuevo reglamento comunitario de seguridad para los vehículos. Es el «culpable» de obligar a instalar una serie de nuevos dispositivos (caja negra, limitador…) en todos los coches que vayan a salir ya al mercado en la UE.

Con esta nueva normativa a la que tendremos que acostumbrarnos, todos los coches, furgonetas, camiones y autobuses incorporarán ya de fábrica, por ejemplo, elementos tan prometedores como un detector de marcha atrás por cámaras o sensores, las tan comentadas alertas de distracción o mareo del conductor y señal de parada de emergencia.

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La caja negra funciona de manera muy sencilla

Caja negra EDR

Al ocurrir un accidente, el EDR grabará los datos durante los 30 segundos previos al accidente… y los 5 posteriores. Toda la información será anónima, eso sí, y solo se registrarán datos en situaciones muy concretas, sin grabar datos personales, como nombre, edad, sexo… Tampoco se contempla que su objetivo sea el de contribuir a esclarecer la culpabilidad de un accidente, sino solo para analizar las causas con la intención de mejorar la seguridad y la conducción.

La nueva caja negra de los coches, según explica la Dirección General de Tráfico, se situará en la centralita, normalmente ubicada bajo el asiento del conductor y atornillada al chasis. Hay distintos parámetros que registrará, como la velocidad, si se usan correctamente los frenos o si se ha producido algún fallo técnico en el vehículo. Pero, conviene insistir, no realizará ni grabaciones de imágenes ni de audio.