comscore

Seat Ibiza. Máximo control para disfrutar sin contratiempos

La seguridad es uno de los pilares básicos a la hora de adquirir un vehículo nuevo, y por eso el Seat Ibiza no ha escatimado esfuerzos en su última puesta al día. Ya no hay excusas, y aunque se trate de un segmento de enfoque utilitario, la dotación es sumamente completa en este sentido.

Ya no se se trata solo de ofrecer de serie en toda la gama elementos como el control de tracción y de estabilidad, o los airbag frontales y laterales delanteros. Dispositivos como un sensor de presión de los neumáticos o un asistente de arranque en rampa también se contemplan en su dotación básica, junto a otros sistemas más sofisticados, como el denominado freno automático postcolisión o un detector de fatiga del conductor. El primero frena el vehículo automáticamente -basta con que se active un airbag- tras producirse una colisión, con el fin de evitar impactos posteriores debido a la energía cinética. Y también enciende las luces de emergencia.

En cuanto al detector de fatiga, el Seat Ibiza incorpora una tecnología capaz de analizar el comportamiento y el modo de actuar del conductor: si percibe algo anormal advierte por medio de varias fases en el cuadro de mandos, hasta recomendar un descanso si lo considera oportuno.

Además, el modelo español también presume en su completa carta de opciones de elementos como los faros bixenón, además de luces diurnas con tecnología LED, sensores de aparcamiento e incluso una cámara de visión trasera que facilita las maniobras a baja velocidad.

Y por si las cosas se complican siempre queda el 'colchón' que otorgan las cinco estrellas registradas en las severas pruebas de colisión realizadas por EuroNCAP.

Nueva dirección electromecánica

La dinámica del Seat Ibiza siempre ha sido uno de los aspectos más valorados por los clientes a lo largo de los años. Y en este sentido, este vehículo ha optimizado ese aspecto al introducir diversas mejoras.

Una de ellas atañe a la dirección electromecánica, ahora más directa en relación a las órdenes dadas desde el volante. Además, se ha mejorado el confort, sin comprometer la agilidad, al ajustar los tarados de los muelles y los amortiguadores.

Además, y gracias al Drive Select, el Ibiza contempla un elemento nada frecuente en su segmento, como es una suspensión adaptativa. Basta con accionar un mando y los amortiguadores se ajustan con dos niveles de dureza diferentes: confort o sport. Esta tecnología sólo está disponible con los acabados FR y Cupra.

Otro elemento importante a la hora de valorar la dinámica del Seat Ibiza es el diferencial electrónico XDS, una tecnología que actúa sobre el tren delantero y que contribuye a optimizar la tracción y la estabilidad a la salida de las curvas. Está reservada a las motorizaciones con más de 100 caballos de potencia.

En definitiva, seguridad y dinámica van de la mano de forma ejemplar en un vehículo que despunta en ambos aspectos.