El Volkswagen e-Golf, el segundo coche eléctrico de batería de la marca, tras el e-up, empezó a producirse en Wolfsburg en 2014. Debido a la alta demanda, su producción se extendió a la Fábrica de Cristal de Dresde. El siguiente en salir de esta línea de montaje será el esperado ID.3, que llegará durante el próximo otoño.