El director de Aston Martin, Lawrence Stroll (padre también del piloto de la escudería británica en F1, Lance Stroll) comenzó dando la bienvenida al DBX 707, que es desde el momento de su salida, el SUV más potente del mundo, superando a modelos como el Lamborghini Urus o el Porsche Cayenne Turbo S E-Hybrid.