Para comenzar, la firma nipona ha creado este Ridgeline que mide 5,39 metros de largo sobre la base de un todocamino, pues cuenta con una plataforma monocasco y no con largueros como la mayoría de sus competidores directos. También se decanta por unas suspensiones independientes equipadas con muelles y amortiguadores, cuando lo habitual es encontrarse con ballestas en la parte posterior para incrementar la capacidad de carga de estos robustos vehículos. Ahora bien, gracias a ello, este Honda Ridgeline podrá presumir de comportamiento dinámico. También sorprende por soluciones como los asientos Magic Seat, un sistema de sonido para la zona de carga, en la que también encontramos toma de corriente y un funcional doble fondo, que Honda aprovecha para ubicar su rueda de repuesto.