El mundo de la seguridad vial sigue experimentado grandes pasos gracias a los avances tecnológicos en las pruebas de choque. En una demostración sin precedentes llevada a cabo por Mercedes-Benz, en colaboración con el Instituto Fraunhofer de Dinámica de Alta Velocidad y el Instituto Ernst Mach (EMI) en Friburgo, se ha realizado el primer accidente con rayos X del mundo utilizando un automóvil real. Este hecho ha desatado una ola de innovación que promete transformar radicalmente nuestra comprensión de los procesos de colisión y, en última instancia, mejorar la seguridad de los vehículos.
Mercedes ya utiliza rayos X en sus pruebas de choque
La prueba se llevó a cabo con una precisión técnica asombrosa. Un dispositivo con barrera de seguridad impactó a 60 km/h contra un vehículo de la Clase C, demostrando la fuerza devastadora de un choque lateral. Sin embargo, lo más destacado de esta prueba no fue la colisión en sí, sino lo que sucedió sobre el vehículo: un acelerador lineal actuaba como una cámara de rayos X, proporcionando una visión interna sin precedentes de los procesos de deformación.
Este avance tecnológico, denominado tecnología de rayos X ultracorta, marca un hito significativo en el desarrollo de herramientas de seguridad vial. Con la capacidad de capturar hasta 1.000 imágenes por segundo (aproximadamente 1.000 veces más que con los procedimientos de rayos X convencionales), este sistema revela detalles antes invisibles, permitiendo un análisis preciso de la dinámica interna durante una colisión. El impacto de esta tecnología va más allá de la mera observación; proporciona información crucial para mejorar la seguridad del vehículo en el futuro.
Entorno seguro para todos
El éxito de esta prueba pionera no habría sido posible sin una meticulosa planificación y una rigurosa protección radiológica. El Fraunhofer EMI desarrolló un completo concepto de protección para garantizar la seguridad de los empleados y cumplir con los requisitos legales. Desde dosímetros hasta medidas físicas como muros de hormigón adicionales, se implementaron para garantizar un entorno de trabajo seguro durante el accidente examinado con rayos X.
El compromiso de la marca alemana con la seguridad vial se remonta a décadas atrás. Desde la primera prueba de choque en 1959 hasta las pruebas más recientes con vehículos eléctricos en 2023, la empresa ha demostrado un compromiso inquebrantable con la mejora continua de la seguridad de sus vehículos. Las últimas pruebas de choque con rayos X están al margen de las que realiza EuroNCAP y donde Mercedes-Benz suele registrar impecables notas (aquí la última del EQS).
