Si bien Rayo McQueen es la estrella indiscutible de la franquicia Cars, los fanáticos de la serie de películas animadas de Pixar saben que otros personajes también merecen atención. Uno de ellos es el «Profesor Z», quien aparece en la secuela y ha inspirado una singular construcción en el Reino Unido, realizada encima de un Toyota iQ.
A pesar de que el «Profesor Z» se diseñó originalmente a partir del microcoche Zündapp de los años 50, los constructores optaron por este modelo de la marca japonesa y fácil de conseguir como vehículo base para esta conversión. Esto se hace evidente solo en el interior y las proporciones, ya que toda la carrocería ha sido rediseñada, tomando prestados rasgos estilísticos del personaje.
¿Cómo quedó este Toyota transformado en el amigo de Rayo McQueen?

El resultado es un vehículo ciertamente peculiar, igual al amigo de Rayo McQueen. Los pasos de rueda recortados son particularmente llamativos, especialmente cuando se combinan con la parte trasera plana. En la parte delantera, los faros redondos sobresalen de los guardabarros y enmarcan una agresiva parrilla en forma de boca. Para aumentar la excentricidad, el parabrisas cuenta con calcomanías especiales para los ojos, que se completan con el monóculo característico del «científico alemán loco» colocado justo frente al conductor.
El interior parece prácticamente sin cambios, aunque con una visibilidad ligeramente comprometida debido a los complementos. Si bien la lista de venta insinúa algunas características inspiradas en el personaje dentro de la cabina, no son claramente visibles en las fotos. El estado general del acabado y la tapicería parece coherente con las 116.603 millas (187.654 km) del odómetro, sin problemas importantes aparentes.
¿Qué características tiene este Toyota iQ modificado?

Debajo del capó del «amigo» de Rayo McQueen se encuentra el pequeño motor de tres cilindros VVT-i de 1.0 litros de Toyota que produce 67 hp (50 kW / 68 PS) y 98 Nm (72 lb-ft) de torque. Cabe destacar que el Toyota iQ también estaba disponible con el motor más potente de cuatro cilindros y 1.3 litros del Auris, que también encontró su camino en el efímero Scion iQ twin y en el Aston Martin Cygnet premium.
Como nota al margen, el modelo japonés a menudo pasa desapercibido a pesar de su excelente dinámica de conducción y su espaciosa cabina de cuatro plazas, impresionante por su longitud compacta de 2.985 mm (117,5 pulgadas). Este modelo, que debutó en 2008, era un rival directo del smart fortwo, pero dejó de producirse en 2015 sin un sucesor directo. En cambio, el Aygo, un poco más grande y popular de Toyota, asumió su papel. Volviendo al distintivo vehículo inspirado en la película, actualmente está valorado entre £8,500 y 10,500 ($10,824-13,372).