Mientras que los híbridos enchufables requieren enchufes en puntos de carga para optimizar su movilidad eléctrica, los no enchufables se recargan de forma autónoma mediante la inercia y la fuerza generada por el motor de combustión, eliminando así la necesidad de depender de un enchufe.
La distinción fundamental entre estos dos tipos de vehículos radica en su método de recarga.
La movilidad sostenible ha transformado el paisaje de los coches de ocasión en concesionarios, suscitando preguntas acerca de la elección más adecuada para cada conductor.
Cars&Cars, un concesionario especializado en vehículos de ocasión, se adentra en este tema crucial al explorar las diferencias esenciales entre los híbridos enchufables y no enchufables.
5¿Cómo elegir entre híbrido enchufable y no?
La elección entre un híbrido enchufable y no enchufable depende en gran medida del perfil de uso del conductor. Los enchufables son ideales para desplazamientos urbanos e interurbanos de 40 a 100 km, siempre que existan puntos de recarga accesibles.
Por otro lado, los no enchufables son más eficientes para aquellos que recorren más de 50 km diarios o superan los 100 km en cada trayecto, ofreciendo un ahorro significativo en el consumo de combustible.