En las gélidas mañanas de invierno, la nieve puede ser un obstáculo impredecible en nuestras carreteras, y estar preparados es la clave para garantizar nuestra seguridad y la de los demás usuarios de la vía. La Guardia Civil de Tráfico, consciente de los riesgos que entrañan los caminos cubiertos por el manto blanco, nos brinda su experiencia y consejos para enfrentar estas situaciones.
Colocar adecuadamente las cadenas en el coche no solo es una medida de seguridad, sino una habilidad necesaria para quienes circulan por zonas propensas a nevadas.
CONCEPTOS BÁSICOS: QUÉ SON Y POR QUÉ SON IMPORTANTES
Las cadenas para neumáticos nacieron de la necesidad de proporcionar mayor adherencia en superficies deslizantes, como el hielo o la nieve. Este dispositivo es esencial para evitar deslizamientos y pérdida de control del vehículo en condiciones meteorológicas adversas. Consisten en una red de eslabones metálicos que se coloca sobre la banda de rodadura de los neumáticos, y su correcto uso puede significar la diferencia entre llegar a nuestro destino o quedar varados en medio de una carretera intransitable.
El uso de cadenas es muy recomendable en zonas de montaña o en lugares donde la acumulación de nieve es habitual durante el invierno. Además, su uso es obligatorio en muchas carreteras, donde se indica mediante señalización específica, normalmente un panel con un neumático y una cadena sobre un fondo azul. No usarlas en estas condiciones puede resultar en multas y, lo que es más grave, en accidentes.
Lo cierto es que sin la correcta colocación de las cadenas, su efectividad se reduce drásticamente. Por ello, la Guardia Civil de Tráfico insiste en la importancia de familiarizarse con este sistema antes de verse en la necesidad de utilizarlo. El no hacerlo puede llevar a instalaciones incorrectas que dañen tanto las ruedas del vehículo como la propia carretera.
INSTRUCCIONES PASO A PASO PARA UNA CORRECTA INSTALACIÓN
La operación de colocar las cadenas en los neumáticos puede parecer intimidante al principio, pero siguiendo unas simples instrucciones podremos realizarla con seguridad y eficacia. Lo primero es saber que la colocación de las cadenas debe hacerse en las ruedas motrices, es decir, aquellas que reciben la potencia del motor.
Antes de comenzar, es crucial estacionar el vehículo en un lugar seguro, lejos de la carretera y con las luces de emergencia activadas. Se recomienda llevar siempre un par de guantes en el coche para evitar manos frías o lastimadas durante el proceso.
El primer paso es extender la cadena sobre el suelo y desenredarla, asegurándonos de que no haya eslabones torcidos o enganchados. Después se coloca sobre la parte superior del neumático, asegurándose de que el sistema de cierre quede hacia el exterior. Posteriormente, se acomoda la cadena alrededor del neumático, moviendo ligeramente el vehículo para poder enganchar la parte inferior.
Finalmente, es imprescindible tensar la cadena lo máximo posible y asegurar el cierre. Una vez que estemos en marcha, es aconsejable detenerse tras recorrer una corta distancia para retensar las cadenas, ya que con el movimiento éstas tienden a aflojarse. Recordemos que la velocidad con cadenas en los neumáticos no debe superar los 50 km/h para evitar daños y garantizar la seguridad.
MANTENIMIENTO Y PRECAUCIONES
No menos importante que saber instalarlas es entender la importancia del mantenimiento de nuestras cadenas. Tras su uso, es esencial limpiarlas y secarlas correctamente para evitar la corrosión y garantizar su buena conservación. Además, se recomienda revisarlas periódicamente para detectar posibles daños o desgaste que puedan comprometer su eficacia cuando más las necesitemos.
En carretera, las cadenas no deben utilizarse en asfalto seco, puesto que además de no ser necesarias, acortarían su vida útil y podrían causar daños en la superficie viaria y en las propias ruedas. Su uso ha de ser exclusivamente cuando existan capas de nieve o hielo en la calzada.
Es también fundamental la prudencia durante la conducción con cadenas, manteniendo una velocidad moderada y evitando maniobras bruscas. La Guardia Civil de Tráfico recuerda que, aunque las cadenas mejoran significativamente la tracción, no son una garantía absoluta contra deslizamientos, y por tanto es crucial mantener la concentración y adaptar la conducción a las condiciones del entorno.
GUARDIA CIVIL INFORMA: TIPOS DE CADENAS Y CÓMO ELEGIRLAS
Existe una variada gama de cadenas para neumáticos en el mercado, y seleccionar el tipo correcto puede ser tan importante como su correcta instalación. Las tradicionales cadenas metálicas son robustas y duraderas, pero también pueden ser más difíciles de instalar. Por otro lado, las cadenas textiles o «fundas para nieve» ofrecen una instalación más sencilla y son menos dañinas para las carreteras, aunque su durabilidad es menor y no son adecuadas para hielo grueso o nieve compactada.
Una recomendación práctica al seleccionar las cadenas es verificar las especificaciones del fabricante del vehículo respecto al tamaño y grosor recomendado para las cadenas, para no interferir con la mecánica del coche. También es importante tener en cuenta el espacio disponible en los guardabarros, pues unas cadenas muy gruesas pueden rozar y dañar el vehículo mientras se conduce.
Algunos modelos de cadenas cuentan con sistemas de tensión automática, lo que facilita su ajuste una vez puestas en el neumático. Otras incluyen sistemas de cierre rápido que disminuyen el tiempo de montaje. Valoremos nuestras habilidades y preferencias para escoger el tipo de cadena que mejor se adapte a nuestras necesidades. La inversión en un buen par de cadenas repercute directamente en nuestra seguridad y comodidad.
APLICACIONES MÓVILES Y SERVICIOS ONLINE
En nuestra era digital, disponemos de varias herramientas tecnológicas que pueden ayudarnos a gestionar mejor las inclemencias del tiempo. Aplicaciones móviles proveen información precisa sobre el estado de las carreteras y si es necesario el uso de cadenas en determinados tramos. Estas aplicaciones, en muchos casos patrocinadas o desarrolladas por instituciones de tráfico, pueden ofrecer también tutoriales interactivos sobre cómo colocar las cadenas de manera adecuada.
Además, existen servicios online que permiten comparar diferentes modelos y marcas de cadenas, así como consultar opiniones de otros usuarios que pueden ser de gran ayuda a la hora de tomar una decisión de compra. En este contexto, plataformas de vídeo como YouTube están repletas de demostraciones y guías paso a paso que pueden facilitar enormemente el aprendizaje de la instalación de las cadenas.
Las redes sociales, por su parte, han abierto un canal de comunicación directa entre los usuarios de la carretera y la Guardia Civil de Tráfico. A través de estas plataformas, la institución comparte alertas en tiempo real sobre las condiciones de las carreteras y consejos para una conducción segura, lo que puede ser de suma relevancia para los conductores que se aventuran en las zonas afectadas por las nevadas.
EN LA PRÁCTICA: CASOS REALES Y EXPERIENCIAS
Relatar experiencias de usuarios que han tenido que utilizar las cadenas en situaciones reales puede ser tan informativo como cualquier manual o guía. Anécdotas de conductores que se han visto sorprendidos por una nevada inesperada y que, gracias al uso correcto de las cadenas, han podido continuar su viaje con seguridad y sin contratiempos, subrayan la relevancia de estar bien preparados.
Por otro lado, existen también historias de aquellos que, por desconocimiento o negligencia, no han colocado las cadenas cuando era necesario o lo han hecho de manera incorrecta, enfrentándose a situaciones de peligro e incluso a sanciones económicas. La Guardia Civil de Tráfico recuerda constantemente que, más allá de la imposición de multas, su objetivo es garantizar una conducción segura para todos.
Como periodistas, compartimos estas historias no solo para alertar sobre los riesgos, sino también para destacar la importancia del aprendizaje continuo en cuestiones de seguridad vial. Con el aumento de los episodios de tiempo extremo debido al cambio climático, las habilidades para enfrentar estos desafíos se vuelven cada vez más cruciales.
El equipo humano detrás de la Guardia Civil de Tráfico y su labor por educar y proteger a los conductores es, sin duda, digno de reconocimiento. Alentar a los conductores a llevar siempre cadenas en el maletero y a aprender a usarlas es parte de un enfoque más amplio para fomentar la responsabilidad y autoprotección en carretera.
En conclusión, la Guardia Civil de Tráfico no solo nos recuerda cómo debemos poner las cadenas en el coche, sino que nos invita a interiorizar una cultura de prevención y seguridad vial. Son los pequeños actos de preparación, como la instalación adecuada de nuestras cadenas, los que pueden marcar una gran diferencia en la seguridad de nuestras vías. Con información, tecnología y conciencia podemos enfrentarnos a los caminos más gélidos con la certeza de que estamos tomando las mejores medidas para protegernos y proteger a otros.
