Si te quieres dar el capricho de estrenar un fascinante Ford Mustang Dark Horse vas a tener que preparar alrededor de 75.000 euros. Sin embargo, al otro lado del océano se pueden hacer con semejante criatura desde 64.380 dólares, el equivalente a unos 56.360 euros al cambio actual. Y ahora si multiplicas esta última cuantía por diez te da como resultado lo que han pagado por este maravilloso ‘pony car’ que han subastado los especialistas de Mecum Auctions. Y es que es mucho más especial de lo que te imaginas.
Vaya por delante que no se trata de un Ford Mustang ‘del montón’ fabricado hace ya 55 años. Esta maravilla es uno de esos pocos elegidos que nacieron para ser transformados en uno de sus míticos Boss 429, unas criaturas que la firma del óvalo azul desarrolló con la excusa de llevarlos a los circuitos de Estados Unidos. Básicamente porque la compañía americana jamás los llevó de forma oficial a la pista para batirse en duelo con los legendarios Charger Daytona y Plymouth Superbird buscando la supremacía en la NASCAR.
El Ford Mustang Boss 429 esconde un 7.0 V8 bajo su capó
Para ello los ingenieros de la firma del óvalo azul arrancaron un proyecto para desarrollar un motor capaz de eclipsar las cifras del mítico HEMI utilizado por sus adversarios. Pero las normas de la NASCAR implicaban ofrecer al cliente de calle una versión de ese motor utilizado en la pista. Y lejos de utilizarlo en los Fairlane Torinos Fastback que llevaron a los circuitos, estos decidieron lanzar una versión del Ford Mustang en la que metieron con calzador ese bloque V8 con 429 pulgadas cúbicas… La friolera de 7.0 litros.
Con calzador, porque ese bloque era tan ancho que no cabía en el vano motor de los Ford Mustang de la época. De ahí que la compañía americana decidiera confiar en los servicios de Kar Kraft, que hizo maravillas para ampliar ese espacio modificando la posición de las torretas de suspensión, ampliando los pasos de rueda en su interior o enviando la batería al maletero entre otros muchos cambios. Solo así se pudo instalar ese legendario 7.0 V8 equipado con carburador Holley de 4 cuerpos, colector de admisión de aluminio o con unas culatas también fabricadas en aluminio bajo las que había unas cámaras de combustión tipo HEMI modificadas y que los ingenieros de Ford llamaron «crescent».
Un par de detalles diferenciaban a estas versiones del resto
Se decía por aquellos entonces que estos Ford Mustang Boss 429 proporcionaban alrededor de 380 CV de potencia. Sin embargo, se rumoreaba que eran bastante conservadores con esa cifra, que en realizad superaba la barrera de los 500 CV. Una brutalidad para la época y una brutalidad para ser domado por medio de un cambio manual Hurst con cuatro velocidades. Este era el encargado de mandar esas cifras en exclusiva a sus dos ruedas traseras.
Al margen de todos estos cambios, los Ford Mustang Boss 429 se veían realmente discretos, porque solo les diferenciaba unos gráficos específicos en las aletas delanteras o unas llantas Magnum 500 cromadas y calzadas con neumáticos Goodyear Polyglas. Se dice que la firma del óvalo azul solo construyó 859 unidades a lo largo del año 1969, mientras que en el año siguiente, solo ofrecieron otros 499 Ford Mustang Boss 429, que se diferencian por las dos rejillas que llegaron a su parrilla para reemplazar a los faros exteriores.
Con esta combinación se fabricaron 13 de estos Ford Mustang Boss 429
Esta unidad que ha subastado el especialista Mecum Auctions fue fabricada el 4 de noviembre de 1969 y sobresale por encima del resto de sus hermanos gracias al particular color que su primer propietario eligió para vestir su carrocería y que se conoce con el nombre de Calypso Coral. Este contrasta con un habitáculo donde abunda un tapizado en vinilo de color blanco. Curiosamente se fabricaron tan solo 13 unidades con esta combinación cromática, pero la compañía de subastas confirma que solo han sobrevivido cinco ejemplares, realmente codiciados por todos los coleccionistas millonarios que buscan poner un Ford Mustang Boss 429 en sus garajes.
Por si todo esto no fuera suficiente, esta maravilla de la ingeniería ha sido debidamente restaurada recientemente sin escatimar en gastos, por lo que tanto su exterior, como su interior o su mecánica, lucen como si hubiera salido ayer mismo de la línea de montaje. Y eso que en sus 55 años de vida esta criatura ha recorrido 52.388 millas (84.310 kilómetros). Sin olvidarnos de que fue entregado con todos los documentos originales de la época de detallan su singularidad, así como la extensa lista de opciones con la que este Ford Mustang Boss 429 fue encargado en su día.
Ha costado lo que 5 Dark Horse y un GTD todos a estrenar
De ahí que alguien con muchas ganas de llevarse esta joya a su casa decidiera pagar la escalofriante cifra de 627.000 dólares (unos 550.000 euros), que como hemos dicho antes, al otro lado del océano te da como para comprar 10 unidades del Ford Mustang Dark Horse a estrenar. O si lo prefieres también lo puedes cambiar por 5 unidades de ese Dark Horse y una del salvaje Ford Mustang GTD. Una maravilla de la ingeniería que también está llamado a convertirse en leyenda con el paso de los años.
Fotos: Mecum Auctions
