Si eres un amante de los viajes de acampada, de vivir aventuras en carretera, de perderte por la montaña o por la playa… en algún momento de tu vida habrás pensado en hacerte con una autocaravana o una cámper. No es de extrañar, esta forma de pasar las vacaciones está más de moda que nunca. Te permite viajar donde y cuando quieras, con total libertad y sin depender de las aburridas reservas de hotel.
Si estás pensando en comprar o alquilar uno de estos vehículos, será mejor que conozcas bien las diferencias entre cámper y caravana. Tener claras estas ideas te asegurará el éxito en tus futuras vacaciones.
Conducción y aparcamiento
En este aspecto salen ganando las cámper. Al tener el chasis completo de una furgoneta están más enfocadas a la comodidad en la conducción. Son más estrechas y por tanto más fáciles de maniobrar por todo tipo de vías. Y también por su confección aerodinámica y peso, su gasto de combustible es mucho menor. Además se pueden conducir con un carné de conducir normal, licencia tipo B. Mientras que es fácil, que las autocarvanas se pasen de peso y requieran sacarse una licencia tipo B96 o el B+E. En cuanto a la normativa de estacionamiento y pernocta ambas están reguladas por la misma Instrucción 08/V-74.
Ahora que ya sabes la diferencia, ten en cuenta el dinero del que dispones, las personas que viajaréis y el tiempo del que disponéis. Seguro que hay una solución que se adapte a tus necesidades y te permita alimentar tu alma viajera.
